No hubo maltratos sino juego, afirman soldados

Los militares involucrados en el escándalo que desató la publicación de un video, en el que soldados de un batallón de Bogotá son golpeados con una tabla por un oficial, coincidieron en que se trató de un juego y no un maltrato físico.
El capitán Francisco Javier Coral, quien aparece propinando los tablazos, admitió que actuó mal, pero dijo que nunca fue un castigo.
Explicó que era un juego con un grupo de soldados con los que apostó dar permisos si perdía, o un tablazo a los soldados si ganaba, para armar en el menor tiempo posible un fusil; los siete soldados que apostaron con el capitán, respaldaron la versión.
Nuevo escándalo en el Ejército por maltratos de un oficial contra un soldado
Un capitán del Ejército fue separado de su cargo y es investigado por la Justicia Penal Militar por haber propinado una paliza con una tabla a un soldado justificando un castigo. El alto mando de la institución asegura que se trata de un hecho aislado.
El caso, ocurrido en la sede del batallón de policía militar número 15 de Bogotá, fue denunciado por un suboficial que grabó un video en su teléfono celular y lo divulgó a través del Canal Caracol.
El comandante de la Décimo Tercera Brigada del Ejército, confirmó el caso de maltrato y lo calificó como "una situación preocupante" pero recalcó que se trata de un hecho aislado.
"Preocupa y se han tomado las medidas inmediatas porque esta situación no es una política institucional del Ejército Nacional ni de la Brigada", señaló el oficial.
Dijo que el caso ya está en manos de un juez de instrucción penal militar y se están estudiando medidas severas para castigar a quienes se sobrepasaron en su autoridad.
Defensoría del Pueblo califica de tortura el uso "de la tabla" para golpear miembros de la Fuerza Pública
El defensor del Pueblo encargado, Darío Mejía, dijo que el castigo con una tabla, al que fueron sometidos varios soldados en el Cantón Norte de Bogotá, es una tortura, y viola los protocolos internacionales sobre derechos humanos.
En diálogo con Caracol Radio, Mejía señaló que el castigo aplicado contra un grupo de soldados "es una tortura, porque se está aplicando un castigo exagerado, desproporcionado e injusto contra una persona, violando protocolos internacionales como la convención contra la tortura".
El funcionario aseguró que el uso de la tabla para castigar a los soldados, viola el código penal, que tipifica la tortura como un delito, y además va en contra de la sensatez humana.
"Sabemos que estas prácticas son costumbre en algunas instituciones, pero yo creo que los derechos humanos nos deben acercar hacia la civilización", señaló el defensor del Pueblo encargado, Darío Mejía, quien señaló que "las prácticas del siglo 17 y 18 deben desaparecer".
Procuraduría asume investigación
La Procuraduría asumió poder preferente e inició indagación preliminar para investigar los hechos ocurridos en diciembre pasado en las instalaciones del Batallón de Policía Militar número 15, adscrito a la Brigada decimotercera brigada, con sede en Bogotá.
La determinacion fue tomada ante las denuncias recibidas con respecto a los presuntos malos tratos a personal de la fuerza pública por parte de un oficial del Ejército Nacional, conducta que puede constituir falta disciplinaria.
Así las cosas la justicia penal militar será apartada de la investigación disciplinaria que será asumida directamente por el despacho del Procurador General de la Nación.
Tablazos contra soldados serían producto de un juego, y no un castigo
Los militares involucrados en el escándalo que desató la publicación de un video en el que un grupo de soldados de un batallón de Bogotá, son golpeados con una tabla por un oficial, coincidieron en que se trató de un juego y no un maltrato físico.
El capitán Francisco Javier Coral, quien aparece propinando los tablazos, admitió que actuó mal, pero dijo que nunca fue un castigo. Explicó que se trató de un juego con un grupo de soldados con los que apostó dar permisos si perdía, o un tablazo a los soldados si ganaba, para armar en el menor tiempo posible un fusil; los siete soldados que apostaron con el capitán, respaldaron a su superior en la versión.
Por su parte, el comandante del Ejército, general Mario Montoya dijo que ya solicitó al Procurador General, Edgardo Maya, y al defensor del Pueblo, Wolmar Pérez, que adelanten con prontitud las investigaciones, para esclarecer si hubo o no excesos por parte del oficial involucrado en el caso.