Científicos italianos hallan nueva variante de vacas locas
Investigadores italianos dijeron que hallaron una nueva variedad de la enfermedad de las vacas locas, lo que provoca preguntas acerca de si esta variante puede surgir de forma natural en el ganado vacuno y de cómo ocurre un mal semejante en los seres humanos.
WASHINGTON.--- Investigadores italianos dijeron que hallaron una nueva variedad de la enfermedad de las vacas locas, lo que provoca preguntas acerca de si esta variante puede surgir de forma natural en el ganado vacuno y de cómo ocurre un mal semejante en los seres humanos.Los cerebros del ganado que sufre la nueva variedad tienen un aspecto diferente al de las vacas afectadas con la forma clásica de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), según los investigadores.Se parecen más a la forma que toman los cerebros de personas que padecen la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (ECJ), que no es la variante que las personas desarrollan cuando ingieren carne afectada por la EEB, sino la que surge de manera misteriosa en una por cada millón de personas en el mundo.Lo más preocupante es que aunque las vacas afectadas eran viejas, no mostraron signos visibles de EEB y sólo se pudo diagnosticar la enfermedad tras la muerte de los animales en el matadero.Sin embargo, Paul Brown, experto en EEB y ECJ del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares, dijo que no creía que el hallazgo implicara la existencia de vacas con una forma oculta de EEB, desconocida para los médicos, que afecte a quienes comen carne vacuna."Probablemente, es otra observación no preocupante, pero creo que merece algún estudio", dijo Brown en una entrevista telefónica. "No hay razón para suponer que puede aparecer en seres humanos de forma extraña".Salvatores Mónaco, del Instituto Zooprofiláctico Experimental de Lombardia, en Brescia, y sus colegas, analizaron los cerebros de ocho vacas de entre cinco y 15 años que arrojaron resultados positivos para la EEB.En el momento de ser sacrificado, todo el ganado parecía saludable. Sin embargo, debido al temor de la epidemia de EEB que surgió en Gran Bretaña en la década de 1980, en Europa se analiza la carne de toda res cuya edad sobrepase los 30 meses para verificar que no esté afectado por la enfermedad de las vacas locas.Seis de los animales dieron resultados positivos para la EEB "clásica", que se cree surgió en ganado que se alimentaba con pienso hecho con restos de ovejas y que hoy día está prohibido en la Unión Europea. Sin embargo, dos vacas tenían dicha variante que luce muy diferente. SUSTANCIA PEGAJOSAEn vez de desarrollar agujeros como los de las esponjas marinas, los cerebros de las vacas afectadas con la nueva variante mostraron grupos de placa amiloide o acumulación de una sustancia proteica pegajosa que se aprecia en los cerebros de algunas personas con la ECJ.Asimismo, se halló que varias regiones cerebrales estaban afectadas.La ECJ, que siempre resulta mortal, es incurable y, excepto en algunos casos claramente genéticos, no se conoce su origen.La revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences, que publicó el estudio, señaló que el descubrimiento plantea la pregunta de si alguna gente puede haber desarrollado la ECJ tras haber comido carne afectada por la nueva variante de EEB.Sin embargo, Brown dijo que no había evidencia sobre esto, pues no ha surgido una epidemia de la ECJ clásica.Una nueva variante de la ECJ, conocida como vECJ, surgió en Gran Bretaña y algunos países europeos a raíz de la epidemia de EEB en el ganado. Dicha enfermedad se ha podido vincular a la ingestión de productos cárnicos afectados por el mal de las vacas locas y en Gran Bretaña mató a unas 139 personas.Según los investigadores, sus hallazgos apuntan hacia la posibilidad de que algunas cabezas de ganado contraigan EEB de manera esporádica, así como las personas contraen la ECJ inexplicablemente.Esto sería perturbador para la industria de la carne, que ha tratado de eliminar la EEB cambiando la alimentación del ganado



