Duhalde baja tono a disputa con petroleras en Argentina
El presidente argentino Eduardo Duhalde bajó el jueves el tono de un enfrentamiento que mantiene con las petroleras debido a que subieron los precios de la gasolina para compensar la devaluación del peso, al calificar el alza como "razonable".
BUENOS AIRES.--- El presidente argentino Eduardo Duhalde bajó el jueves el tono de un enfrentamiento que mantiene con las petroleras debido a que subieron los precios de la gasolina para compensar la devaluación del peso, al calificar el alza como "razonable"."Hubo noticias que eran catastróficas. Decían (por los medios de comunicación) que iba a haber aumentos del combustible entre un 20 y 40 por ciento y ya hacían cálculos sobre cuánto lo iban a trasladar a los demás productos, al transporte. Lo que se verificó hasta ahora es una suba (alza) muy pequeña", explicó Duhalde en un programa radial.Y agregó: el alza "se esta manejando dentro de límites razonables".Sin embargo, apenas 24 horas antes el mandatario había afirmado que las petroleras deberían absorber los costos de la devaluación del peso sin trasladarlos a los precios, ya que habían obtenido grandes ganancias en el país y ahora deberían acostumbrarse a "perder un poco".Las tres principales compañías del sector en Argentina -la española Repsol-YPF , la angloholandesa Shell y Esso, filial de la estadounidense Exxon - aplicaron en los últimos días alzas en algunos combustibles que llegaron hasta el 6,5 por ciento.La medida enfureció al gobierno, que busca evitar que la devaluación del peso -que en casi dos meses ya supera el 55 por ciento- dispare un brote inflacionario incontrolable que aumente la conflictividad social en un país con niveles récord de pobreza y desempleo.Dentro de la puja con las petroleras, el ministerio de Economía estableció que el estado aplicará una retención del 20 por ciento a las exportaciones de crudo y un impuesto de 5,0 por ciento sobre las ventas externas de derivados para mejorar los ingresos fiscales del Estado.La medida cayó mal entre las empresas del sector y hasta en sus trabajadores, de los cuales un grupo declaró una fugaz huelga esta semana contra la iniciativa, que deberá regir desde el 1 de marzo.



