Principal sindicato de Venezuela anuncia protestas antigobierno
La principal central obrera de Venezuela anunció el miércoles protestas antigubernamentales, lo que agrega un elemento a la inquietud política al gobierno del presidente Hugo Chávez, que enfrenta insubordinaciones militares y una depreciación de la moneda, el bolívar,
CARACAS.--- La principal central obrera de Venezuela anunció el miércoles protestas antigubernamentales, lo que agrega un elemento a la inquietud política al gobierno del presidente Hugo Chávez, que enfrenta insubordinaciones militares y una depreciación de la moneda, el bolívar.El presidente de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), Carlos Ortega, cuya legitimidad en el cargo ha sido cuestionada por Chávez, advirtió que la situación del país es "totalmente explosiva".El líder sindical, que en diciembre apoyó a empresarios en un paro de 12 horas contra Chávez, dijo que "hay una situación difícil, explosiva" por el alto grado de conflictividad laboral en medio de medidas económicas de ajuste."Vamos a ir a un conflicto nacional", enfatizó en una entrevista con el canal de televisión Globovisión. Anunció una marcha para el 27 de febrero y la posibilidad de un paro nacional de uno o dos días que "va a ser convocado en la primera quincena del mes de marzo".También advirtió que "si no hay respuesta positiva en relación a la problemática que viven los trabajadores y sus familiares, que vive el propio país, esto va a conducirnos irremediablemente a una huelga general en el país".La CTV agrupa a alrededor de un millón de trabajadores de los sectores privado y público, incluyendo los de la estratégica industria petrolera.Chávez, un militar retirado con tres años en la presidencia, enfrenta una crisis de confianza que se exacerbó en las últimas dos semanas cuando tres oficiales pidieron su renuncia por considerar que lleva al país a una "tiranía".Los militares disidentes han recibido masivas expresiones de apoyo en las calles de parte de opositores que apoyan la salida del mandatario.Ortega aseveró que la medida de dejar flotar libremente el bolívar, que contribuyó a crear más confusión en el cuarto exportador mundial de crudo, es "un detonante".La libre flotación cambiaria entró en vigencia el miércoles pasado, acompañada de medidas de recorte de gastos dirigidas a palear una caída en los vitales ingresos petroleros.En la última semana el bolívar se ha devaluado 17 por ciento frente al dólar y las expectativas de economistas y analistas apuntan a una pérdida del valor de la moneda que sobrepase el 30 por ciento en lo que resta del año.En medio de la devaluación del bolívar, muchos comerciantes han remarcado precios y congelado ventas. En las calles abundan las opiniones de venezolanos que se quejan porque están cada día más pobres. EN ESPERA DE MAS MILITARES DISIDENTESCuando aún no se ha terminado de digerir el efecto de las medidas económicas, se han levantado expectativas de que otros militares se unan a sus compañeros disidentes, lo que ha llevado a analistas a opinar que las medidas tambalearán si no se calma el ambiente político.Algunos analistas políticos creen que la insubordinación de los tres militares refleja un sentimiento "generalizado" en el seno de la Fuerza Armada Nacional (FAN), que rechaza el estilo de gobierno de Chávez.Pero el gobernante, un teniente coronel retirado que encabezó un intento de golpe de Estado en 1992, asegura que cuenta con el apoyo pleno de la institución castrense.El contralmirante de la Armada Carlos Molina, el oficial de más alto rango en exigir el lunes la dimisión de Chávez, dijo el miércoles a periodistas tras reunirse con sus superiores en la Comandancia de la Marina, en Caracas, que sus críticas han sido escuchadas por lo que se sentía "excelente".Molina, quien como el coronel de la Aviación Pedro Soto y del capitán de la Guardia Nacional Pedro Flores exigió la dimisión de Chávez, protestó la actitud de Venezuela de buscar vínculos con lo que dijo son gobiernos no democráticos y rechazó el "mal manejo" de la política fiscal y cambiaria.Los tres oficiales disidentes han pedido que tras la dimisión del gobernante se forme un gobierno civil de transición que convoque a elecciones.



