MinTic podría recuperar parte del anticipo a Centros Poblados
58 mil millones de pesos se encuentran en una cuenta del Citibank de una compañía en Delaware.
Frente al controvertido contrato que buscaba llevar internet a las escuelas y colegios de zonas apartadas del país, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) busca recuperar el dinero que fue entregado como anticipo.
En total se entregaron casi 70 mil millones de pesos, de los cuales MinTic tiene un rastro de su paradero. 58 mil millones se encuentran en una cuenta del Citibank de una compañía en Delaware, un pequeño estado en Estados Unidos, que es famoso por tener más empresas registradas que ciudadanos. El representante legal de dicha compañía es Diego Benjamín Aronis. Los otros 11 mil millones fueron girados a la empresa Incelsa SAS, una empresa colombiana con cuenta en el BBVA.
Obras por más de 117 millones de pesos, en el corredor Quibdó-Medellín, sector 2 y el Consorcio Vías para el Chocó está integrado por dos empresas que también hacen parte de la Unión Temporal Centros Poblados: Intec de la Costa, con el 20%; ICM Ingenieros SAS con el 50%.
ICM Ingenieros: Entre 2009 y 2010 pagó $800 millones de pesos en sobornos para ganar licitaciones en Bogotá, en el caso por el que condenaron al exgobernador de Cundinamarca Álvaro Cruz. Intec de la Costa SAS ha estado involucrada, en 2018, en el escándalo de corrupción por la adjudicación de un contrato para el mejoramiento de una vía en el departamento de Bolívar. Hacía parte del consorcio Vías de San Jacinto del Cauca que cedió el contrato 10 días después de haberlo firmado.
En Caracol Radio se sigue investigando sobre la recuperación de estos dineros y confirmando datos sobre el tipo de contrato firmado, que al parecer tiene una cláusula que permitiría recuperar 40 mil millones. Además, se busca respuestas por parte del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) frente a la denuncia del exembajador Francisco Santos sobre la falta de escucha a la compañía Estadounidense Hughesnet, experta en satélites, que manifestó interés en el contrato.