Hoy hace 30 años se firmó el pacto que acabó con la Guerra Verde en Boyacá

Tunja (Colombia)

Memorias de paz y guerra, y la entrega de un puente peatonal en el Río Minero, donde se arrojaron miles de muertos, hacen parte de la agenda conmemorativa.

Este domingo 12 de julio, en Chiquinquirá y en todo el occidente de Boyacá se cumplirán 30 años de la firma de paz que acabó con la ‘guerra verde’ en la zona esmeraldera de Boyacá, y se va a celebrar por parte del Programa de Desarrollo y Paz del Occidente de Boyacá.

Karol García, directora del Programa de Desarrollo y Paz del Occidente de Boyacá, explicó que con memorias que recuerdan a las más de 6 mil víctimas de la guerra verde, se celebrará la firma de la paz de forma virtual.

“La guerra por el llamado oro verde, acabó por los años 90 cuando con la presencia de la iglesia, se logró acercar a los actores de la misma, familias y empresarios esmeralderos que se disputaban el poder que generó la explotación de la minería esmeraldas, y después de más de 6.000 muertos, muchos inocentes, pactaron una paz que hasta ahora se ha cumplido bajo la firma de 11 acuerdos”, sostuvo García.

Agregó que “en este hecho histórico resaltan familias muy conocidas en la región: la familia Carranza, Triana, Rincón y Molina dentro de otras. Ellos entendieron en principio, y así lo establecen los acuerdos, el respeto por la vida, sobre cualquier diferencia. Hay que decir que no solamente la guerra verde se concentró en el occidente de Boyacá, no, también tocó al sur-oriente boyacense, pues este también es territorio esmeraldero y aguarda parte de esta historia”.

El Programa de Desarrollo y Paz del Occidente de Boyacá, informó que por cuenta de la pandemia del coronavirus, tuvo que modificarse el programa establecido para la conmemoración histórica.

“Este domingo 12 de julio, día en que se firmó la paz, estaremos lanzando una estrategia virtual a través de todas las redes sociales oficiales de los municipios del occidente y suroriente de Boyacá, y del Programa de Desarrollo y Paz del Occidente de Boyacá, para ir mostrando las memorias de la guerra verde, recordando a las víctimas, porque aunque hemos superado ese capítulo, no los hemos olvidado”, puntualizó García.

En la mañana de este domingo 12 de julio de 2020, se realizará un acto simbólico sobre el río Minero a la altura del municipio de San Pablo de Borbur: “se realizara el ejercicio de re significación del rio minero, a través de la entrega de un puente peatonal, en el lugar en donde se arrojaban los cuerpo de muchas de las personas que eran asesinadas en medio del contexto de la guerra verde, y es darle otro sentido a este lugar. En la tarde de este domingo, en Muzo, se estará haciendo la conmemoración a las víctimas”, explicó García.

Pero la celebración del gesto de paz, continuará hasta que se acabe el 2020: “el 25 de julio en el municipio de Pauna se realizará un reconocimiento a la literatura y al arte con la premiación del concurso de memoria del occidente, y el 31 de diciembre en Chiquinquirá se le dará el cierre al año y al mes de la paz”.

De manera alterna, producirán el lanzamiento de un documental y de una mini serie de televisión que está siendo construida por las comunidades, con la reconstrucción de las historias de la guerra y de la paz, un ejercicio que busca cerrarle la puerta a cualquier capítulo de violencia.

“La gente dice: ‘nosotros hicimos la guerra, nosotros mismo hicimos y nos encargamos de conservar la paz’, y esa es la premisa de esta parte de la historia de Colombia, concluyo García..

Desde la Basílica de Nuestra señora del Rosario de Chiquinquirá, la vicepresidenta de Colombia, Martha Lucía Ramírez, destacó como un ejemplo esa firma de paz: “la nobleza de la gente del occidente permitió la paz, y es nuestro compromiso como estado, trabajar por la equidad y por disminuir las diferencias”.

Recordemos que hasta la Basílica de Nuestra señora del Rosario de Chiquinquirá llegó Ramírez, para participar de la oración nacional para pedirle a la virgen milagrosa, patrona espiritual de Colombia por los enfermos y víctimas de la pandemia, y para que cese el Covid-19.

Adicional a esto, Ramírez visitó la ciudad llamada “capital mariana de Colombia”, para conmemorar los 101 años de la coronación del lienzo de la Virgen de Chiquinquirá.

Treinta años después, la comunidad de la zona esmeraldera de Boyacá, en el suroriente del departamento y en el occidente del mismo, siguen en su proceso de resiliencia, y le han dado espacio a que su cultura y su economía giren entorno no solo a minería, sino también en torno a los cultivos del cacao, y al turismo ecológico.