En Montería, pasajeros no dejaron a una enfermera subirse a un bus

En Montería fue denunciado otro acto de discriminación contra el personal del sector de la salud. El hecho ocurrió en horas de la mañana del miércoles 15 abril en un paradero, cuando una enfermera intentó tomar el servicio de una buseta de Metrosinú y fue sorprendida por los gritos de los pasajeros exigiéndole al conductor que no la dejará subir.

Ante la presión, el conductor se vio obligado a poner en marcha el vehículo sin prestarle el servicio a la profesional de salud. La mujer de inmediato reportó el caso ante IPS en la que labora y también extendió la queja ante la empresa de transporte público colectivo.

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“Recibimos la queja de una enfermera que se desplazaba hacia su lugar de trabajo desde Los Garzones. En el momento de querer abordar el vehículo, los usuarios que estaban al interior empezaron a manifestar inconformismo con expresiones de que iban a ser infectados si la dejaban subirse”, comentó María Estela Arrieta, gerente operativa de Metrosinú.

Y a lo anterior agregó: “Desafortunadamente, la reacción del conductor fue ceder a la presión del grupo y seguir con la ruta sin ofrecerle el servicio a la enfermera”.

Metrosinú logró corroborar que la enfermera logró recibir el servicio en el siguiente bus que pasó por la ruta y pudo llegar a su lugar de trabajo, pero ya el acto de discriminación había causado dolor y humillación en esa persona.

“Hacemos un llamado general a población: los empleados del sector salud merecen nuestro respeto y consideración. Debemos apoyarlos. Tienen derechos, como todos, a utilizar el servicio de transporte público colectivo y no debemos discriminarlos de ninguna forma”, comentó la Gerente Operativa de Metrosinú.

La compañía anunció que abrirá una investigación interna disciplinaria para esclarecer este hecho y también denunciarán el caso ante las autoridades policiales para dar con los responsables de los actos discriminatorios.

Como se recordará, el domingo pasado una enfermera del Hospital San Jerónimo de Montería fue agredida en plena vía pública por desconocidos que se transportaban en moto. La mujer fue ultrajada solo por vestir su uniforme blanco de enfermera. Los agresores la atacaron, según la denuncia, aduciendo que era propagadora del COVID-19. El caso está en manos de la Policía, que encargó a un grupo especial para dar con la captura de los desadaptados.

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