Doble calzada Rumichaca - Pasto, la vía soñada por los nariñenses
Caracol Radio recorrió los frentes de obra que ya se iniciaron en este importante proyecto que cuesta $2.3 billones.
La falta de infraestructura vial ha frenado la competitividad del departamento de Nariño que pese a su ubicación estratégica y su condición de frontera no llega a los niveles esperados. De ahí que obras como la doble calzada que conecte a la región con el vecino país del Ecuador es una necesidad imperiosa según voceros del comité intergremial de Nariño.
Caracol Radio recorrió los frentes de obra que ya se iniciaron en este importante proyecto que cuesta $2.3 billones y que se financia con recursos de la concesionaria en un 30% y el 70% con financiamiento de la banca internacional.
German de la Torre gerente de la Concesión Unión Vial del sur a la que le fue adjudicado el proyecto por parte de la ANI señala que son 83 kilómetros de construcción de una vía en doble calzada hasta el corregimiento de Catambuco y el mejoramiento del tramo entre Catambuco y la ciudad de Pasto.
El proyecto tiene dos alternativas: mejoramiento de la existente con la construcción de una doble calzada y un tramo de 27 kilómetros de vía totalmente nueva entre San Juan y Pilcuan con cuatro carriles en total.
Nuevo peaje
Además de la reubicación del actual peaje de Tangua la concesión ubicará un nuevo peaje que en Ipiales cuyo recaudo está orientado recuperar la reinversión una vez las unidades funcionales sean entregadas para operación.
Las demoras del proyecto
El proyecto adjudicado hace más de dos años ha sufrido retrasos en su ejecución principalmente por los trámites para obtener las licencias ambientales de tres tramos. Hasta ahora solo uno de estos Pedregal- Catambuco ha sido licenciado, el de Pilcuan San Juan debe ser tramitado nuevamente tras ser archivado por la ANLA y el tercero el trayecto Ipiales desde Rumichaca está pendiente de tramitar pues los estudios de impacto ambiental no se han podido adelantar por falta de consenso con las comunidades indígenas de la zona.
Del cronograma global el proyecto ha avanzado solo en un 5% lo que genera preocupación entre los gremios y autoridades regionales que temen repetir la experiencia de la concesión Devinar a la que le fue entregada la obra en el 2005 hasta el 2015 cuando se anticipó la terminación del contrato sin lograr la ejecución.
El primer tramo entre Tangua y Pedregal se contempla entregar en octubre del 2020 y la obra total en febrero de 2021. El proyecto podría reducir su alcance sino se logra un acuerdo con las comunidades indígenas. Así quedó establecido en el otro si firmado con la ANI en febrero pasado en donde se estableció un plazo de 24 meses para lograr este acuerdo.
Para los transportadores de carga el proyecto es vital para dinamizar la economía regional, las obras reducirían en 50 minutos la conexión entre Pasto e Ipiales para vehículos livianos y 30 minutos para vehículos pesados.
Según Andrés Charfuelan presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros en Nariño la doble calzada se considera como la obra más importante en la historia del departamento no solo por el mejoramiento de la seguridad vial en un tramo altamente transitado sino también por la necesidad de estar acorde con las vías de Suramérica.
Por su parte el presidente de la Asociación nariñense de ingenieros Nelson Peña reconoce las dificultades y retrasos que ha tenido el proyecto pero destaca que los frentes de trabajo ya estén operando para que la comunidad nariñense crea en el mismo. Agregó que confía en que se logre las licencias ambientales para que no se detenga el cronograma ni se reduzca el alcance pactado desde el principio.
Según el dirigente del gremio es necesario además que el tramo Catambuco Pasto que hoy está incluido en el proyecto pero solo para su rehabilitación se adicione y se construya en doble calzada o un par vial para que no se convierta en un ´embudo´ por todo el tráfico que llegaría a través de la doble calzada a Pasto.