Defensoría del Pueblo pide a las autoridades hacerle frente a la violencia en Antioquia
Briceño, Tarazá y Anorí, tres municipios del departamento de Antioquia, están en alerta por desplazamiento forzado tras enfrentamientos entre grupos ilegales.
Foto de referencia desplazamiento en Colombia
Tras la situación que se registra por conflicto armado en tres municipios de Antioquia, la Defensoría del Pueblo pidió a las autoridades locales, departamentales y nacionales, hacerle frente a la situación de violencia que afecta a cientos de familias de ese departamento.
En el municipio de Briceño, cerca de 2 mil campesinos de tres corregimientos tuvieron que salir de la zona bajo amenazas de pagar multas o salir definitivamente de sus tierras.
De igual manera en Tarazá, en las veredas de Doradas Altas y Tahamí, alrededor de 100 familias se han tenido que desplazar de sus viviendas en zona rural a lo urbano, por enfrentamientos en el territorio.
En Anorí hay cerca de 2 mil 600 personas desplazadas por enfrentamientos entre el Clan del Golfo y disidencias del frente 36 de alias Calarcá.
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Frente a este panorama de conflicto, la Defensoría del Pueblo hizo un llamado urgente a los ministerios del Interior, de Igualdad y Equidad, además de Prosperidad Social y la Unidad de Restitución de Tierras, para que se integren activamente al Comité Territorial de Justicia Transicional y puedan hacer frente a la situación.
La Entidad aseguró que, “es prioritario que el Ministerio del Interior convoque de forma extraordinaria al Subcomité Nacional de Prevención, Protección y Garantías de No Repetición, con el fin de implementar acciones urgentes que protejan a las comunidades afectadas”, señaló la Defensoría en su comunicado.
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También extendió la petición a la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, para emprender labores de desminado, con el objetivo de garantizar el retorno seguro de las familias desplazadas a sus hogares.