Juan Manuel Galán niega que el Nuevo Liberalismo sea un proyecto familiar o de “delfines”

En Sin Anestesia de La Luciérnaga de Caracol Radio, el precandidato presidencial Juan Manuel Galán se refirió a varios temas clave de la actual coyuntura política nacional, incluyendo las críticas que ha recibido su familia por una supuesta “concentración de poder” en caso de que su hermano, Carlos Fernando Galán, actual alcalde de Bogotá, y él coincidan en altos cargos del poder público.

La conversación también abordó propuestas sobre seguridad, descentralización del Estado y el papel del nuevo liberalismo en la historia constitucional del país.

¿Una familia como empresa electoral?

Frente a la pregunta sobre si no resultaría inconveniente que dos hermanos ocupen simultáneamente posiciones estratégicas,uno como alcalde de Bogotá, y el otro como jefe de Estado, Galán fue enfático en que esa decisión está en manos del electorado:

“Esa decisión debe ser democrática y debe estar en manos de los ciudadanos, si se llega a dar. Lo importante es que llegue a gobernar Colombia un equipo sólido, con visión y con respaldo en el Congreso de la República”, afirmó.

El líder del Nuevo Liberalismo reconoció que a su hermano no le agrada el calificativo de “familia electoral” y que se ha manifestado públicamente en contra de esa idea, pero recalcó que las reglas de juego están en la Constitución y que el respeto por ella debe primar.

“A nosotros no nos mueve la vanidad ni la ambición personal. Lo que queremos es contribuir con un equipo preparado para enfrentar los graves problemas que atraviesa el país, empezando por la crisis del sistema de salud, que hoy está en el primer lugar de las preocupaciones de los colombianos”.

Descentralización y poder presidencial

Uno de los puntos más destacados de la entrevista fue su propuesta de reducir el poder del presidente de la República, una figura que Galán calificó como “monárquica”:

“Hoy tenemos un sistema presidencialista exageradamente centralista. Yo propongo una regionalización profunda del país. Que las regiones recuperen su capacidad de decidir su destino, que tengan presupuesto, capacidad de gasto y de inversión”.

También hizo énfasis en la necesidad de construir una relación de apoyo entre el Gobierno Nacional y los alcaldes, especialmente aquellos de municipios de tercera a sexta categoría:

“Los alcaldes de pequeñas poblaciones no tienen apoyo suficiente para estructurar proyectos de inversión. Necesitamos un gobierno aliado, no uno que entre en confrontación con ellos”.

En relación con el deterioro de la seguridad en distintas zonas del país, Galán recordó que la Policía Nacional está bajo la línea directa del presidente y no de los alcaldes:

“La cadena de mando va desde el presidente hasta el director de la Policía. Se requiere colaboración y coordinación real con los gobiernos locales. El país necesita soluciones, no disputas políticas entre niveles de gobierno”.

El legado del Nuevo Liberalismo y la Constitución del 91

Galán también aprovechó el espacio para recordar el legado histórico de su movimiento político, el Nuevo Liberalismo, especialmente en la redacción de la Constitución de 1991, que cumple 34 años:

“Todo el capítulo de derechos en esa Carta fue una contribución directa del Nuevo Liberalismo. Para nosotros, honrar la Constitución no es solo un discurso, es un principio de vida”.