El Dorado se convierte en líder en la región con estrategia destacada por la Nasa que protege la salud
La iniciativa implementada en la terminal 1 del aeropuerto El Dorado se desarrolló con el apoyo de la empresa Murarte
Aeropuerto El Dorado, Bogotá. / Mabelin Santos
El aeropuerto El Dorado informó este miércoles 23 de abril que ha implementado una estrategia de sostenibilidad con la que busca proteger la salud de la ciudadanía y cuidar el medio ambiente. De esta forma, la terminal aérea más importante del país se convierte en la primera de la región en implementar una estrategia que implica el uso de pintura descontaminante.
Esta estrategia del uso de la pintura ha sido destacada a nivel mundial por entidades como la Nasa y iScape.
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En total se intervino 1.000 metros cuadrados de la terminal aérea con una pintura que contiene nanotecnología fotocatalítica, para eliminar la contaminación del aire. Esos 1.000 metros cuadrados pintados equivalen a la siembra de 1.000 árboles maduros, por lo que harían un trabajo muy similar en la recolección de contaminantes.
Mauricio Vélez, gerente de infraestructura de Opain, mencionó que la iniciativa implementada en la terminal 1 del aeropuerto El Dorado se desarrolló con el apoyo de la empresa Murarte para proteger la salud de los ciudadanos. “Esto nos permite tener el equivalente a mil árboles maduros, garantizando una calidad del aire tanto para nuestros usuarios, viajeros y la comunidad aeroportuaria, todos los que trabajamos aquí cada día”.
“Esta es una pintura con una tecnología especial que nos permite hacer la captura de todas las partículas contaminantes que se dan en la zona de alto tráfico bajo el viaducto de la terminal. Para nosotros esta es otra iniciativa más que nos permite seguir afianzándonos en el cuidado del medio ambiente y obviamente ser amigables con este planeta”, agregó
Mientras tanto, Juan Carlos García, CEO de Murarte Global, aclaró que este producto se activa con la luz solar y genera un efecto fotocatalítico. “Lo que hace es absorber todos los gases de efecto invernadero de los carros, buses, taxis que entran al aeropuerto, los evapora y los destruye."
“El aeropuerto El Dorado y Opaín tienen ahora un bosque de mil árboles sembrados adultos en Bogotá“, puntualizó.
