Imputan a dos policías por la muerte de un soldado y la detención ilegal de un líder indígena
Los hechos se registraron en La Tagua (Putumayo), el pasado 27 de febrero de 2024.
Imputan a dos policías por la muerte de un soldado y la detención ilegal de un líder indígena / Caspar Benson
La Fiscalía presentó ante un juez de control de garantías al subcomandante de la estación de policía de La Tagua, subintendente William Armando Mendoza Chilama, y al patrullero Darwin Emilio Arcos Martínez, por su presunta participación en el asesinato de un soldado que estaba prestando el servicio militar y la detención de un líder indígena.
Durante la audiencia, un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos imputó a los uniformados los delitos de:
- Homicidio agravado
- Privación ilegal de la libertad
- Fraude procesal y hurto calificado y agravado.
¿Cómo ocurrieron los hechos?
Los hechos ocurrieron el 26 de febrero de 2024, cuando el soldado regular Alexander Orozco Zambrano, perteneciente al Batallón de Selva 49, disparó y mató a tres de sus compañeros de armas antes de escapar de la unidad militar.
Un día después, el patrullero Arcos Martínez habría disparado contra Orozco, quien se encontraba remando en una canoa por el río Caquetá, dejando al soldado gravemente herido. El 28 de febrero, Orozco fallecería en un centro asistencial en Florencia, Caquetá.
La investigación de la Fiscalía habla del uso de la fuerza por parte del patrullero y aseguran que fue desproporcionado, pues Orozco, en el momento del disparo, se encontraba en un estado de indefensión y no representaba una amenaza para los uniformados.
Ahora, después del tiroteo, el subintendente Mendoza Chilama ordenó la detención de Luis Evelio Rodríguez Arigatoque, un reconocido líder indígena de la región, quien había estado observando el traslado del soldado herido.
Durante el procedimiento, a Rodríguez se le incautaron 27 millones de pesos en efectivo que llevaba en un maletín, destinado a pagar a los trabajadores de un proyecto social que lideraba.
La captura de Rodríguez se sustentó en la sospecha infundada de que había ayudado al soldado Orozco a escapar. Sin embargo, tras una revisión de los hechos, no se encontraron pruebas que respaldaran esa afirmación, por lo que el líder indígena fue liberado. A pesar de que el dinero no fue declarado ni entregado a la Fiscalía, este aún no ha sido devuelto a Rodríguez, y su paradero sigue siendo desconocido.
