El Níspero, en María La Baja, también avanza con la protocolización de su PIRC

María La Baja

En un acto lleno de significado, el Consejo Comunitario de Comunidades Negras Ma-Majari del corregimiento de El Níspero celebró la protocolización de su Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC). Este hito representó un avance crucial en la reconstrucción del tejido social afectado por el conflicto armado.

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La protocolización se realizó con el acompañamiento de la Unidad para las Víctimas y el programa Restaurando Nuestro Futuro, apoyado por USAID, la OIM y ACDI/VOCA, con el Ministerio Público como garante de derechos. Este es el segundo PIRC protocolizado en María La Baja, tras el del Consejo Comunitario de Matuya. Ambos representan una inversión de $9.136.016.407 para fortalecer proyectos productivos y el desarrollo sostenible de la región.

“Desde la Unidad para las Víctimas estamos muy orgullosos de la protocolización del Plan Integral de Reparación Colectiva del Consejo Comunitario de Comunidades Negras Ma-Majari. Este logro evidencia la dedicación y el compromiso de la comunidad para avanzar hacia la reconstrucción de su tejido social”, expresó Omar Fernández Obregón, subdirector nacional y director territorial encargado de Bolívar y San. Andrés.

“Agradecida primeramente con Dios, porque hoy se está cumpliendo lo que hace tiempo hemos estado esperando. Este proceso no va a sanar todo el daño que el conflicto provocó, pero sí marca un paso importante. Esperamos que las acciones reparatorias asumidas se implementen en el territorio. Es un gozo y una alegría ver este sueño cumplido”, señaló Marlidys Pérez Marimón, representante del Consejo Comunitario.

“Este plan reúne proyectos productivos agrícolas y ganaderos, y lo más importante, reivindica al colectivo campesino en su vocación agrícola. También fomenta la espiritualidad y las prácticas tradicionales que fortalecen a la comunidad, con énfasis en mujeres, niños y adultos mayores”, afirmó Uribia Narváez, formuladora del equipo nacional de la Subdirección de Reparación Colectiva.

El PIRC del Consejo Ma-Majari busca combinar la recuperación de identidad cultural, la implementación de proyectos productivos y la consolidación de la paz. Con este plan, la comunidad espera transformar sus anhelos en realidades para las generaciones presentes y futuras.

La región de María La Baja se posiciona como ejemplo de cómo la reparación colectiva puede reconstruir comunidades resilientes y vibrantes. Este proceso, según la Unidad para las Víctimas, honró la memoria de los afectados mientras fortaleció el tejido social para un futuro más justo y lleno de oportunidades.