Vendedores informales de Tunja denuncian falta de acuerdos y temen ser agredidos
Julio Borda, vocero de los vendedores informales, denuncia la falta de avances en las negociaciones con la Alcaldía de Tunja y advierte sobre un posible desalojo forzoso.
Tunja
La situación de los vendedores informales en la capital boyacense ha llegado a un punto crítico, luego de semanas de intentos fallidos por llegar a un acuerdo con la administración municipal. Julio Borda, vocero de los vendedores, hizo un llamado público para denunciar lo que considera un “abandono total” por parte de las autoridades, mientras los trabajadores informales enfrentan cada vez más dificultades para subsistir en medio de operativos de despeje del espacio público.
“Teníamos programada una reunión desde hace aproximadamente 15 días para tratar nuestras peticiones, pero nos la aplazaron en varias ocasiones. Primero para el miércoles de la semana pasada y luego para el lunes. Fuimos varios líderes a reunirnos con la Secretaría del Interior, pero no nos recibieron”, relató Borda. Según el vocero, los vendedores acudieron al CREM, con la esperanza de llegar a algún acuerdo, pero la espera fue en vano. “Realmente perdimos toda la mañana porque fue evasivo todo el proceso, y hasta ahora no hemos llegado a ningún acuerdo concreto”, añadió.
La situación de los vendedores, que suman aproximadamente 50 personas, es crítica. “No solo carecemos de alimentos, sino que ni siquiera nos dejan entrar agua. La situación está bastante difícil. ¿Qué está pasando en la Alcaldía? No lo sé. Hemos tocado las puertas de la Personería Municipal, la Defensoría del Pueblo y la Policía Nacional, pero no nos han dado respuestas claras”, afirmó Borda, visiblemente preocupado por la falta de apoyo institucional.
Uno de los puntos que ha generado mayor preocupación entre los vendedores es el rumor de un posible desalojo forzoso. “Nos enteramos de que están organizando un grupo de policía para sacarnos por la fuerza. Tememos que nos maltraten, o peor aún, que nos desaparezcan. Con esta administración, ya tenemos miedo”, expresó el vocero.
Borda también criticó la forma en que la administración municipal ha manejado la situación: “Reúnen a 20 funcionarios, 20 policías y 20 soldados del ejército solo para quitarle el sustento a una madre cabeza de familia que intenta ganarse la vida. Hace dos meses entregamos un pliego de peticiones, de las cuales aceptaron siete puntos, pero hasta la fecha no han cumplido ninguno”.
¿Qué dice la alcaldía?
Por su parte, la Alcaldía de Tunja emitió un comunicado a través de sus redes sociales, asegurando que han estado abiertos al diálogo con los vendedores informales. “Desde la Secretaría del Interior se han escuchado las peticiones de los vendedores informales, tanto de aquellos pertenecientes a la cooperativa Coopaz como de los no cooperados. Durante el diálogo se expuso la Ley y la normatividad que regula el control, verificación y despeje del espacio público. Como Administración Municipal, mantenemos nuestro compromiso de continuar con el diálogo de manera respetuosa, pero siempre bajo la premisa de que los controles y el despeje del espacio público seguirán adelante, por el derecho que tienen los ciudadanos a disfrutar de espacios sanos, despejados y seguros”.
Sin embargo, los vendedores insisten en que hasta el momento no han visto avances significativos. “Lo que necesitamos es que nos dejen trabajar en nuestros puestos mientras se encuentra una solución. Estamos prácticamente secuestrados por la administración municipal”, concluyó Borda, quien además señaló que seguirán buscando el apoyo de organismos de control como la Fiscalía y la Procuraduría para proteger sus derechos.