Madres cabeza de familia denuncian falta de pagos por parte de la UNGRD en La Guajira
A 102 madres pertenecientes a la comunidad Wayúu en Riohacha se les debe dos meses de pago por parte del programa de ollas comunitarias de la Unidad.
Colombia
Sigue la polémica alrededor de la Unidad para la Gestión del Riesgo de Desastres. Caracol Radio conoció una denuncia, por parte de una de las comunidades de la Guajira, según la cual a las madres cabeza de familia que trabajan con el programa de ollas comunitarias de la Unidad, no se les ha cumplido con sus pagos.
Esta situación se está presentando en Riohacha, La Guajira, en donde a 102 mujeres Wayúu, madres cabeza de familia, quienes trabajaban en 34 ollas comunitarias de la región y a las que se les contrató por 90 días para atender a 100 personas de la comunidad y entregarles dos raciones de alimento diario, esto entre desayuno y almuerzo, se les debe dos meses de su trabajo.
“Nosotras iniciamos a trabajar el día 17 de agosto. El programa supuestamente duraba 90 días seguidos sin parar un día y firmamos contrato como casi al mes o al mes de estar trabajando. Desde agosto hasta hoy sólo nos han pagado un solo mes de trabajo”, aseguró a Caracol Radio una de las mujeres de la comunidad.
Lo que explican es que incluso a mediados de los 90 días su contrato este se pausó pues la corporación Prosperitas, encargada de hacer las contrataciones tanto con los proveedores como con la Unidad para la gestión del Riesgo, no había realizado los pagos correspondientes para obtener los alimentos necesarios.
“Nosotros trabajamos hasta el 28 de octubre porque la Fundación no tenía los recursos para comprar los alimentos. Los proveedores que le facilitaban a ellos los alimentos no le querían entregar más alimentos porque ellos no le habían cancelado y le debían una suma de dinero muy alto, entonces nosotros paramos desde el 28 de octubre hasta el día 18 de noviembre. De ahí, comenzamos a laborar nuevamente hasta el 6 de diciembre”, dijo.
Segú indican, desde la comunidad ya se intentó pedir respuestas a la Corporación, pero solo les dicen que revisarán los casos.
“No nos han querido pagar y ayer por lo menos yo le escribí a la representante legal en mi desespero porque ya mis hijos entraron al colegio y ni siquiera tengo cómo comprarles los uniformes a mis hijos, ni siquiera los útiles escolares. Yo estoy muy desesperada porque estoy pasando mucha necesidad y no es justo después de que nosotras hicimos un trabajo donde ni siquiera podíamos descansar ni los domingos”, añadió.
Así mismo, en Caracol Radio intentamos comunicarnos tanto con la Unidad para la Gestión del Riesgo de Desastres como con la Corporación implicada, pero no hemos obtenido ninguna respuesta frente a esta denuncia.