Procuraduría formula cargos a inspector de Trabajo de la Dirección Territorial de Huila
Al parecer, el funcionario vendría cometiendo hechos persistentes y demostrables de violencia de género en contra de una de sus compañeras.
Neiva
La Procuraduría General de la Nación formuló cargos disciplinarios contra el inspector de Trabajo de la Dirección Territorial de Huila, Diego Fernando Quimbaya Rengifo, por presunto acoso laboral contra una de sus compañeras.
La denunciante señaló que, desde el año 2020, ha sido víctima de conductas continuadas por parte del investigado que le han generado un daño psicológico, ansiedad, depresión y nerviosismo.
Al parecer, Quimbaya Rengifo vendría cometiendo hechos persistentes y demostrables de violencia de género, tendiente a infundir miedo, intimidación, terror y angustia en la funcionaria del Ministerio, luego de que esta terminara su relación sentimental con el disciplinable.
La víctima de posible acoso laboral habría señalado que, posterior a la finalización de la relación, ocupó un cargo del que resultó ser la jefe directa del investigado, lo que le generó el acoso laboral, “pues el acusado de la conducta mostró hostilidad en las reuniones que se llevaban a cabo, además refería expresamente no querer trabajar en el mismo grupo, haciendo divulgación de situaciones personales (…)”.
Adicionalmente, al parecer, se contactó con la hija de la afectada, usando la identidad de su hijo, buscando tener acercamiento con ella, lo cual le generó que tuviera que ser remitida a tratamiento por psiquiatría y formulación de medicamentos, ante los hechos de hostigamiento y violencia psicológica por parte de Diego Quimbaya.
Las pruebas recaudadas también muestran que el funcionario, de manera anónima, manifestó que la víctima incumple sus obligaciones como coordinadora, pero posteriormente, mediante correo electrónico, señaló que sus afirmaciones fueron mentirosas e incluso se reconoce como un acosador sexual solicitando ser investigado por la Fiscalía.
Para la Procuraduría, lo anterior evidencia “actos hostiles que posiblemente ubican la conducta del investigado dentro de los lineamientos determinados como acoso laboral”.
La actuación reprochada a Quimbaya Rengifo fue calificada provisionalmente como gravísima a título de dolo.