Procuraduría formula cargos al exsenador Mario Castaño por red de contratación
Para el Ministerio Público las conductas se consideran gravísimas a título de dolo
Bogotá
La Sala Disciplinaria de Instrucción de la Procuraduría determinó que el exsenador Mario Castaño, lideró una red de corrupción e indujo a varios alcaldes del país para que escogieran a personas afines a su estructura para la celebración de diversos contratos y obtener beneficios económicos para él y terceros.
Los casos recopilados por la Procuraduría señalan que Castaño, a través de un tercero, determinó a los alcaldes de Piendamó y Suárez, en Cauca; Samaná en Caldas y Balboa en Risaralda, para intervenir indebidamente en diferentes contratos estatales de manera que se garantizara su adjudicación, así como el posterior disfrute de los recursos que de ellos obtenían.
El Ente de Control asegura que el exsenador Mario Castaño intervino en el amañamiento y direccionamiento de los contratistas del consorcio San Miguel, para apropiarse de más de 1.500 millones, que si bien fue celebrado por la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres estuvo siempre bajo la directriz del grupo liderado por el exparlamentario.
También el excongresista hizo que una persona miembro de su organización hiciera creer que 2.000 millones del Ministerio de Cultura se iban a destinar al desarrollo íntegro de un proyecto, y desviar 300 millones para la coautora y él mismo.
En los tres casos investigados por la Procuraduría, Mario Castaño, irrespetó el ordenamiento normativo y su deber de actuar siempre en defensa de la legalidad a la que estaba obligado por su rol y la representación popular de la que estaba investido.
Para la Procuraduría las actuaciones del exsenador son consideradas faltas disciplinarias y las calificó en todos los cargos como gravísimas a título de dolo.