Indignación en Boyacá por supuesto racismo contra una familia chocoana en Paya
Una profesora asegura que sus dos hijos fueron golpeados y abusados en una institución educativa en Paya.
Tunja
La docente de Inglés, Kerlin Sugey Murillo Mena, oriunda del Chocó, cuenta que llegó al municipio de Paya (Boyacá), huyendo de la violencia, pero lamentablemente en esa zona del país se enfrentó junto a sus dos hijos al racismo, matoneo y presuntos abusos sexuales.
“Fuí nombrada para prestar mis servicios en Paya en el corregimiento de Morcote en la Institución Educativa El Rosario. Cuando incursione en la comunidad indígena fuímos bien acogidos, pero cuando se levantó las medidas de la emergencia sanitaria nos vemos obligados a la presencialidad y allí no les caí bien ni a mis compañeros ni a mi jefe por ser negra afrodescendiente”, cuenta la profesora Murillo Mena.
Narra que sufrió acoso laboral a lo cual no le prestó atención, pero se incrementaron los rechazos y malos tratos frente a los estudiantes. “El rector le decía a los estudiantes que nos les hiciera caso ni se acercaran a esos micos”.
Según Kerlin Sugey, en el momento que comenzaron a agredir a sus dos hijos le tocó denunciar el racismos y discriminación ante la inspección de Policía de Morcote.
“Posteriormente me tocó denunciar ante la Comisaria de Familia y la Personería porque estaban agrediendo a mis hijos los mismos estudiantes de básica primaria”, narró a W Radio.
Dice la docente que las agresiones a sus hijos fueron físicas, verbales y sexuales. “Me tocaba llevar constantemente los niños a centros de salud donde eran atendidos por la doctora que ante tanta situación, la médico tuvo que activar la ruta de atención integral para caso de bullying, violencia de género y sexual porque la institución hacía caso omiso a todo lo que estaba manifestando de forma verbal y por escrito”.
La profesora Kerlin dice que todos los ataques era dirigidos por el rector Jorge Humberto Cuy Niño. “Hay testigos de las agresiones contra mis hijos”.
Revista Semana, que desarrolló la investigación de este caso, muestra fotografías de los hijos de la docente con golpes y heridas, al parecer, propinados por otros niños de la institución.
“Mis hijos pagaron toda la gota amarga. En ese sitio mis hijos recibieron fracturas en el cráneo, partiduras en el mentón, en la cara, lesiones en todo el cuerpo, acceso carnal y todo se comprobó por parte de la médico de salud sino también con Medicina Legal”, explicó la docente a Caracol Radio.
Toda esa situación, cuenta Kerlin, le generó crisis de ansiedad, estrés severo al no encontrar salidas a sus problemas. “En una reunión de comité de convivencia, me acorralaron y decía que mis hijos eran violentos y que mis hijos los agredían a ellos. Imagínese mi hijo de cinco añitos agrediendo a varios de 10 y 15 años, es algo ilógico”.
Insiste que todas las agresiones ocurrieron dentro de las jornadas académicas y fuera de ella. “Incluso mis hijos no podían salir a la calle, porque les tiraban piedra y no podía practicar música ni danzas porque ahí se las agredía. Fue mucho el infierno que vivimos allá, a tal punto que debimos tener medidas de protección, como cercar la casa”.
Entre tanto, el docente de la Institución Educativa El Rosario, Jorge Humberto Cuy Niño, aseguró en W Fin de Semana que no es cierto que empleara términos racistas contra Kerlin y sus dos hijos y que por el contrario se atendió el caso tan pronto se conoció.
“Nunca sucedieron esos hechos que ahí se narran y todo se encuentra en curso en investigación en la Fiscalía y los demás entes de control. Me parece bien que se le dé celeridad a la investigación sobre ese tema”, explicó Cuy Niño.
El rector desmintió a la docente frente a los términos racistas contra ella y los niños. “Es falso que les dijera mico a los niños porque nuestra institución se ha caracterizado por ser incluyente; aquí tenemos docentes de varias regiones del país y nunca había sucedido una situación de esas”.
Sobre las denuncias, el rector manifestó que inmediatamente informaron la ruta de atención integral para la convivencia escolar, pero insistió: “En desarrollo de la jornada escolar no se presentaron acciones violentas y ningún tipo de agresión”.
Agregó: “En ningún momento, desde la rectoría de la institución, se omitió ninguna nota o queja que se haya quedado sin actuar y todo es materia investigación. Nosotros tenemos nuestro material probatorio donde podemos dar fe”.
Por su parte, el personero de Paya, Iván Leonardo Rodríguez, dice que su entidad conoció el caso por correo electrónico, medio por el cual la profesora Kerlin denunció los hechos.
“Cuando la Personería tuvo conocimiento de estos hechos, inmediatamente se procedió a emitir un auto en donde se ordenaba a la Comisaria de Familia del municipio realizar de manera inmediata la verificación de derechos de los menores”, explicó.
De igual manera, la Personería ordenó dentro de un auto remitir a la oficina de control interno disciplinario de la Gobernación de Boyacá con el fin de que se investigará los hechos.
“Sin embargo, posteriormente se solicitó, previo a la solución de fondo de estos procedimientos, se tomarán medidas para la no repetición de los hechos. Haciendo seguimiento al proceso administrativo que adelantó la Comisaría de Familia teníamos que ya estos hechos habían sido puestos en conocimiento de esa entidad”, afirmó Rodríguez.
Sostuvo que se adelantó un proceso de restablecimiento de derechos dentro de los cuales se ordenó a la Secretaría de Educación del departamento el traslado inmediato de la profesora debido a que su estadía en zona rural del municipio de Paya, no se le podría garantizar la seguridad.
“Tenemos que la Secretaría de Educación en todo momento desatendió estás solicitudes, porque desde la Personería se le requirió de manera inmediata el traslado sin obtener respuestas”, dijo.
En el mes de abril de 2022, la Personería Municipal procedió a interponer una acción de tutela para que se diera cumplimiento a la orden de autoridad de familia del municipio para el traslado. “Solo hasta que hubo una orden de un juez fue que la Secretaría de Educación hizo traslado”, denunció el personero.
Dijo que se presentó informe a la Procuraduría, informando las acciones adelantadas por su despacho. " todas las denuncias que la profesora Kerlin instauró ante la Personería también lo hizo ante la Procuraduría Regional y de Familia y allí nos solicitaron información que se entregó de manera oportuna”.
Finalmente, la profesora Kerlin y sus hijos se encuentra en el municipio de Chita (Boyacá) donde, al parecer, dice la docente comenzó el matoneo contra uno de sus hijos.