Diplomáticos y otros ciudadanos aceleran su salida de Afganistán
Estados Unidos ha culminado el traslado al aeropuerto de todo el personal de su embajada, aproximadamente 4.000 personas
Los gobiernos extranjeros han acelerado la evacuación de sus diplomáticos y otros ciudadanos de Afganistán tras la toma del poder por los talibanes y el caos que reina en Kabul, aún más visible en su aeropuerto por donde los empleados de las embajadas y miles de civiles tratan de salir del país.
Estados Unidos ha culminado el traslado al aeropuerto de todo el personal de su embajada, aproximadamente 4.000 personas, horas después de iniciar una evacuación aérea.
Para reforzar esa operación, el Pentágono autorizó este domingo el envío de 1.000 soldados más a Kabul, lo que significa que, en un plazo de 48 horas, habrá "aproximadamente 6.000" militares estadounidenses en el aeropuerto de la capital afgana, confirmó el portavoz del Pentágono, John Kirby.
De Kabul salió ya la noche pasada un grupo de unos 40 alemanes a bordo de un aparato estadounidense, que fueron trasladados a Doha, en el emirato de Catar, informa la televisión pública ARD.
La totalidad del personal de la embajada y sus familiares se encuentra en la terminal militar del aeropuerto de Kabul. Ahí permanecerá un equipo mínimo, informó anoche el ministro de Exteriores, Heiko Maas, para organizar el operativo.
El propósito de Alemania es evacuar a "cuantas personas sea posible", tanto personal de la embajada y sus familiares como colaboradores locales, afirmó asimismo anoche la ministra de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer.
Japón evacuará también al personal de su embajada y ha pedido a sus nacionales residentes en Afganistán que abandonen el país si no hay una causa de fuerza mayor que los retenga allí.
Australia y Nueva Zelanda también informaron este lunes que evacuarán a sus ciudadanos y a decenas de afganos que trabajaron para ellos en Afganistán.
Por otro lado, miles de personas desesperadas por huir de Afganistán desataron el caos este lunes en el aeropuerto de Kabul, intentando abordar vuelos de repatriación en el primer día del país bajo el control de los talibanes, después de que el propio presidente afgano, Ashra Ghani, huyera ayer en secreto.
La mayoría son ciudadanos afganos que se apresuraron al aeropuerto llevados por la idea de que Estados Unidos va a sacar a los afganos, dijo a un funcionario del aeropuerto, que pidió el anonimato.