La nefasta herencia de “Kiko” Gómez
Preso e investigado por diversos delitos, el exgobernador dejó una estela negativa a La Guajira.
La situación de crisis institucional de La Guajira se hizo evidente el 12 de octubre del 2013, cuando las autoridades capturaron en medio de una parranda vallenata en Barrancas, uno de sus fortines políticos
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Desde entonces, Gómez Cerchar es investigado por presuntamente constituir una alianza con el Bloque Norte de las Autodefensas y la banda criminal de Marcos Figueroa, a quien se le atribuyen varios asesinatos y delitos en la región
Gómez es acusado además de la presunta participación en el asesinato del concejal de Barranca Luis Gregorio López, el 22 de febrero de 1997, y en los homicidios de Luis Alejandro Rodríguez y Rosa Mercedes Cabrera, el 7 de julio de 2000 en Fonseca, del dirigente Henry Ustáriz Guerra, perpetrado el 2 de abril de 2008; su esposa, la exalcaldesa de Barrancas, Yandra Brito Carrillo, cometido el 28 de agosto de 2012, en Valledupar, y Dinora Hernández Sierra, conocida como La Chachi Hernández, el 20 de noviembre
Danovis Alfonso López, exjefe de los Rastrojos en La Guajira y testigo en el proceso, sostiene que Gómez “utilizaba la política” para mandar a asesinar a sus detractores
A estas declaraciones se le suman la del exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, quien lo señala de ser uno de los partícipes de la llegada de los ‘paras’ a La Guajira
El 22 de mayo del 2014, la Corte Suprema de Justicia determinó que fuera un juzgado especializado de Bogotá el que llevara el proceso que se adelanta contra el exgobernador de la Guajira, por su presunta participación en los delitos de concierto para delinquir y homicidio agravado
El alto tribunal atendió así la solicitud de la Fiscalía General, que señaló que los testigos han recibido amenazas y que por motivos de seguridad, el proceso debe trasladarse a Bogotá, lejos de la influencia que aún mantiene el exgobernador en La Guajira.
