Por contaminar, dueña de una curtiembre irá a la cárcel
Esta es la primera condena con pena de prisión en el país por delito ambiental; además, tendría que pagar una pena económica adicional de hasta 70 millones de pesos.
Por no acatar una medida de suspensión de actividades, impuesta por la Secretaría de Ambiente de Bogotá, la dueña de la curtiembre Las Gaviotas, Maria Ismenia Mateus de Camargo, pasará mínimo 4 años tras las rejas por el cargo de contaminación ambiental en fuente hídrica
Esta es la primera condena con pena de prisión en el país por delito ambiental; además, tendría que pagar una pena económica adicional de hasta 70 millones de pesos. Así se dio a conocer en una audiencia en los juzgados de Paloquemao, donde la propietaria aceptó cargos por el delito de contaminación ambiental
Esta curtidora no acató una medida preventiva de suspensión de actividades impuesta por la Secretaría de Ambiente (SDA) y siguió trabajando normalmente. Además, intentó engañar a las autoridades instalando un bypass que transportaba y vertía aguas contaminadas al río Tunjuelo
Los conceptos técnicos de la SDA evidencian el constante desacato de la normatividad ambiental en la curtiembre Las Gaviotas. En cuanto a cromo, uno de los químicos usados en el proceso de pelambre, la industria registró 166,3 miligramos por litro, cuando la norma permite tan sólo 1 mg/l. La lectura oficial de la sentencia se llevará a cabo el viernes 26 de noviembre, desde las 2 de la tarde. Entre tanto Mateus de Camargo continuará en libertad hasta que se dicte la sentencia
