Tour de Francia

Confirmado el regreso de Lance Armstrong al ciclismo profesional

El estadounidense Lance Armstrong, de 36 años y siete veces ganador del Tour de Francia, dijo hoy martes que volverá a competir profesionalmente

El estadounidense Lance Armstrong, de 36 años y siete veces ganador del Tour de Francia, dijo hoy martes que volverá a competir profesionalmente en el ciclismo como parte de una campaña de concientización a nivel global sobre el peligro del cáncer. Su anuncio coincide con una entrevista exclusiva en el sitio web vanityfair.com en el que el ciclista dijo que tiene su mira puesta en ganar por octava vez el Tour de Francia. Ya no es un rumor. Lance Armstrong regresará el año que viene al pelotón internacional y lo hará para ganar un nuevo Tour de Francia. Sería el octavo y de conseguirlo la ya de por sí prodigiosa hazaña de ganar siete seguidos con la que se retiró en 2005 elevaría al fenómeno de Texas a la categoría de casi sobrenatural. Ganar un Tour es complicado; lograr cinco, como consiguieron Jaques Anquetil, Eddy Merckx y Miguel Indurain, fue extraordinario; y sumar siete, como ya hizo el protagonista de esta historia casi increíble, se antoja ya inigualable; intentar uno más de propina después de tres años retirado, y cercano a la cuarentena, parece un reto imposible. Pero si a alguien no le puede negar de antemano la capacidad de hacerlo es, sin duda, a Armstrong. Durante mucho tiempo, demasiado quizás, pudo con todo y con todos. Incluso con quienes tiempo después demostraron haberle tenido poco cariño. O haberle considerado sospechoso. Pero, ahora, además de a los escépticos ante sus triunfos, que los hay, y no pocos, al duro recorrido que cada año supone la carrera francesa y su ritmo infernal, el otrora imbatible líder del US Postal deberá vencer otros obstáculos. El primero que se le adivina es la cohabitación con Alberto Contador, presente y futuro del nuevo ciclismo mundial y favorito, antes del sorprendente anuncio de esta noche, a ganar en 2009 una carrera en la que ya se impuso en 2007 y que en 2008 le impidieron las cuitas de la organización con su nuevo equipo, el Astana. Un equipo al que su director, el que llevase al estadounidense en sus tiempos de gloria, Johan Bruyneel, ve el destino irremediable de quien liderara su actual estructura durante una década. "Se me haría raro estar yo en Astana y que él corriera, por poner un ejemplo con el CSC o el Rabobank", decía hoy el belga todavía sin creerse una noticia que puede crearle más de un dolor de cabeza. Tampoco confiaba mucho en la confirmación de lo que la mayoría veía como un simple rumor el propio Contador, que podría ser el mayor damnificado del regreso del viejo campeón. El español recibía la misiva llegada de allende los mares con una mezcla de sorpresa, humor y respeto: "no sé lo que tendrá de cierto el rumor, pero parece sorprendente, una cosa curiosa. Lo veo como un rumor que revolucionaría el mundo del ciclismo. Sería un buen compañero y una experiencia única y sería un orgullo porque como corredor le he admirado mucho. En cuanto a si podría ganar el Tour, creo que lo que se proponga, es capaz de conseguirlo", aseguró. Qué poco se esperaba la confirmación del rumor, que se ha demostrado una vez más es la antesala de la noticia. Decíamos que Bruyneel no ve a Armstrong en otro equipo. Nadie lo ve. Pero, tampoco a Contador de comparsa en el Tour. Esta situación lleva a recordar la historia de hace dos décadas entre Bernard Hinault y Greg Lemond. Otros dos grandes. Más el francés. No acabó del todo bien aquello. ¿Se repetirá la historia? La respuesta en julio próximo. El ciclismo mundial -todavía en estado de shock- está ávido por conocerla. EFE

El siguiente artículo se está cargando

Escucha la radioen directo

Caracol Radio
Directo

Tu contenido empezará después de la publicidad

Programación

Ciudades

Elige una ciudad

Compartir

Más acciones

Suscríbete

Tu contenido empezará después de la publicidad