EEUU detiene avance terrestre, nuevos ataques a Bagdad

BAGDAD.--- Estados Unidos continuó el sábado su inclemente campaña de bombardeos a Bagdad, pero las tropas terrestres interrumpieron su acelerado avance hacia la capital iraquí para reagruparse y reforzar las líneas de abastecimiento.
El presidente estadounidense, George W. Bush, frustrado por las críticas de que sus estrategas militares fueron sorprendidos por la fortaleza de la resistencia iraquí, advirtió que hay más sacrificios en el camino, pero prometió que la victoria total es una certeza.
En intensos bombardeos durante la noche, misiles Tomahawk impactaron el Ministerio de Información en el centro de Bagdad mientras la aviación estadounidense bombardeaba en la ciudad sureña de Basora un edificio donde se cree que se congregaban unos 200 paramilitares iraquíes.
Iraq dijo que más de 50 personas, entre ellos muchas mujeres y niños, murieron el viernes cuando una bomba cayó en un mercado callejero abarrotado en el norte de Bagdad.
Cuando el amanecer iluminó la mañana del décimo día de la guerra, el distante sonido de los ataques aéreos se oía en dirección al sur de la capital, donde se cree que se atrinchera la Guardia Republicana en espera de un previsto asalto de las tropas estadounidenses y británicas.
Después de aproximarse a unos 80 kilómetros de Bagdad, las fuerzas estadounidenses se detuvieron para reabastecerse de alimentos, combustible y municiones, dijeron oficiales que declinaron ser nombrados.
Esta "pausa operativa" podría durar de cuatro a seis días para reforzar las líneas de abastecimiento que han sido atacadas y hostilizadas por la milicia Fedayeen, intensamente leal al líder iraquí Saddam Hussein.
"Nos hemos adelantado a nuestras líneas logísticas", dijo un oficial en una unidad estadounidense en el punto más avanzado hacia el norte, en el centro de Iraq. Las raciones de comida fueron reducidas en al menos una de las unidades de infantería de avanzada y el uso del combustible también fue limitado.
Cerca de la ciudad de Najaf, helicópteros estadounidenses atacaron el sábado unidades de las tropas elite de la Guardia Republicana, matando a por lo menos 50 soldados iraquíes y destrozando unos 25 vehículos, dijo un alto oficial.
"Disparamos 40 misiles y logramos 40 impactos. Hemos confirmado la destrucción de al menos 25 vehículos, incluyendo tanques, transporte blindado de personal y camiones, y al menos 50 muertos", dijo el mayor Hugh Cate a Reuters.
MISIL IRAQUI
En la Ciudad de Kuwait, un misil iraquí evadió las defensas antimisiles Patriot y cayó en el mar muy cerca de un centro comercial, que sufrió estragos, y dos personas resultaron lesionadas, dijeron las autoridades kuwaitíes.
Según las fuentes, el misil, probablemente un Silkworm contra navíos de fabricación china, fue disparado desde los alrededores de la provincia iraquí de Faw, que según las fuerzas británicas fue capturada en los primeros días de la guerra.
Las encuestas en Estados Unidos reflejaron que la población espera ahora una guerra más sangrienta, extensa y costosa en Iraq que cuando comenzó la invasión hace poco más de una semana, pero Bush restó importancia a los críticos de la estrategia militar estadounidense.
"Estamos infligiendo un daño severo a las fuerzas enemigas", dijo Bush a un grupo de veteranos de guerra en la Casa Blanca. "Contra este enemigo no aceptaremos otro resultado que una victoria completa".
Impactados iraquíes acudieron el viernes por la noche a un hospital en un suburbio del norte de Bagdad en busca de seres queridos presuntamente muertos o heridos en una explosión en un mercado.
Osama Sakhari, un médico del Hospital Al Noor, dijo que había contado 55 muertos y más de 47 heridos por la explosión en el mercado, un incidente que afectará más los esfuerzos de Estados Unidos de ganarse la confianza y simpatía de los iraquíes.
"¿Este es el humanismo del que está hablando Bush? Carece de toda misericordia, Dios lo haga fracasar", dijo Ali Kadhin, cuyo hijo de tres años resultó herido de gravedad en el ataque.
Los militares estadounidenses atribuyeron una explosión en un área residencial de Bagdad a mediados de la semana a un misil iraquí errante y dijeron que estaban investigando este nuevo incidente.
IMPACTO EN EL MINISTERIO DE INFORMACION
Poco después de la medianoche, al menos un misil hizo impacto en el Ministerio de Información, donde los dirigentes del gobierno han ofrecido numerosas conferencias de prensa desde el inicio de la guerra.
El corresponsal de Reuters Khaled Yacoub Oweis dijo que todo indicaba que un misil perforó el techo del edificio, de 11 pisos. Las antenas y platos de satélite en el techo de la instalación quedaron destruidos y el área de los alrededores se llenó de cristales destrozados.
En medio del fuego de antiaéreas y el ruido de los aviones, las mezquitas de la ciudad llamaron por los altavoces a los fieles a que acudieran a las oraciones a pesar de las explosiones esporádicas que iluminaban el firmamento.
En Washington, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, acusó a Siria de proveer equipos de visión nocturna a Iraq. "Consideraremos este tipo de tráfico como actos hostiles y hacemos responsable al gobierno sirio de tales envíos", dijo.
Damasco ridiculizó la acusación, diciendo que Washington sólo desea desviar la atención de los muertos iraquíes.
Las imágenes de la guerra en Iraq han acrecentado la indignación árabe contra el conflicto, que Washington insiste en que no está dirigido contra el pueblo iraquí.
En Iraq, los testigos reportaron ataques continuos de las tropas estadounidenses cerca de la ciudad sureña de Nassiriya. Las autoridades estadounidenses dijeron que cuatro marines estaban desaparecidos después de cruentas batallas contra focos de resistencia iraquí.
Los militares estadounidenses dijeron que la aviación seguirá golpeando a las fuerzas desplegadas en los alrededores de Bagdad en los próximos días, mientras se solucionan los problemas en las líneas de suministros.
Cerca de la ciudad de Najaf, los ingenieros se apresuraban para construir un aeródromo en el que puedan aterrizar aviones de transporte C-130, lo que aliviará la necesidad de tener que enviar los suministros por carretera. Najaf está a 160 kilómetros de Bagdad.
Sin embargo, otras unidades militares en la retaguardia de la ofensiva aún seguían avanzado, reportó un corresponsal de Reuters que viaja con las tropas.