EEUU alarmado por creciente producción de heroína en Colombia

WASHINGTON.--- Colombia, considerado uno de los principales suministradores de cocaína, se está convirtiendo en un creciente productor de la heroína enviada a Estados Unidos, dijo un funcionario de alto rango de Washington ante un comité de la Cámara de Representantes.
Los cultivos de amapola, materia prima del opio, son más difíciles y costosos de erradicar que los de coca, y la tendencia fue caracterizada como "perturbadora" por Paul E. Simons, secretario de Estado adjunto para asuntos de narcotráfico internacional y cumplimiento de la ley.
"Los estimados (...) del gobierno estadounidense ilustran un perturbador aumento en los cultivos de amapolas de opio en Colombia en los últimos años", dijo al comité del Congreso, en una intervención sobre la crisis de heroína en Estados Unidos.
Simons indicó que los cultivos de la amapola del opio aumentaron casi 62 por ciento, desde 4.050 hectáreas en 1998 hasta un estimado de 6.540 hectáreas en el 2001, suficientes para suministrar hasta un tercio de la heroína consumida en Estados Unidos.
El funcionario estimó que ese número podría aumentar a 10.000 hectáreas en el 2003.
El presidente colombiano Alvaro Uribe, quien asumió el cargo en agosto, lucha contra la producción de drogas, que también financia los grupos guerrilleros de su país.
La guerra civil en Colombia, de 38 años de duración, y que causa la muerte de unas 3.500 personas al año y la anarquía en grandes áreas del país, dificulta el enfrentamiento a la producción de drogas.
Simons dijo que bajo el gobierno de Uribe, Colombia tenía ahora "un liderazgo fuerte y efectivo preparado para hacer su parte" en la guerra contra las drogas.
El funcionario instó al Congreso a aprobar el pedido de un presupuesto de 731 millones de dólares para el 2003, con vistas a combatir la producción de drogas en los Andes, parte del cual mejoraría un programa de fumigación diseñado para erradicar cultivos de coca y amapola.
El financiamiento completo será "esencial para alcanzar nuestras metas", dijo.
Algunos miembros del Congreso han expresado preocupación de que el gobierno esté ignorando el problema de la heroína, al concentrarse demasiado en la coca, que tiene cerca de 200.000 hectáreas de cultivos.
"No estamos ignorando el cultivo de la amapola de opio", dijo Simons, y agregó que las autoridades colombianas y estadounidenses estaban en medio de "la fase más agresiva del programa de fumigación de amapola de este año", dedicando más aviones y helicópteros para eliminar los cultivos.
El funcionario indicó que el gobierno tenía el objetivo de fumigar casi tres cuartas partes de los cultivos de amapola este año, y planea erradicarlos todos el año próximo.
A diferencia de la coca, la amapola del opio se cultiva en terrenos bien escondidos y dispersos en un área muy amplia de escarpadas montañas, a menudo defendidas por grupos guerrilleros, dijo el funcionario. Fumigar los cultivos de amapola cuesta tres veces más que tratar de erradicar los de coca.