Mujeres desplazadas batallan para sobrevivir en Colombia

BOGOTA.--- Carmen, una de las millones de mujeres desplazadas por el conflicto armado en Colombia y que ahora son cabezas de familia, está preocupada pues sólo ha dado de comer a sus tres pequeños hijos una sopa de verduras.
Pero eso no es todo, Carmen aún tiene que completar los cuatro dólares que le cobran en un hospedaje del centro de Bogotá para pasar la noche, luego que el desbordamiento de un río al sur de la ciudad inundó la habitación que había rentado.
"Mire usted, si llueve no podemos quedarnos a vender la mercancía y mis chinos (niños) y yo nos vamos a tener que quedar en la calle", dijo Carmen mientras señala a sus pequeños, con sus ropas sucias, que no sobrepasan los cinco años.
Ella y sus hijos constituyen una de las miles de familias desplazadas que buscan refugio en las principales ciudades de Colombia, donde buscan su supervivencia con la venta de una docena de artículos en los semáforos de las calles.
Los refugiados se han visto obligados a abandonar sus propiedades en zonas rurales para huir de la guerra interna de casi cuatro décadas que azota a este país de más de 40 millones de habitantes.
El drama del desplazamiento humano de Colombia por causa de la guerra interna es el cuarto más grande a nivel mundial, detrás de Afganistán, Sri Lanka y Azerbayán, según la oficina del alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Francisco Galindo de la ACNUR aseguró que sólo dos de los 32 departamentos en que se divide políticamente Colombia no tienen problemas de refugiados.
"Todos los demás departamentos del país tienen desplazamiento, sea como expulsores, sea como receptores o como ambos", precisó Galindo.
Hasta un 52 por ciento de los desplazados en este país son mujeres y la mayoría de ellas actúan como cabeza de hogar, agregó.
PROBLEMA QUE SUPERA A CUALQUIER ESTADO
El conflicto armado de Colombia, el más prolongado del hemisferio, dejó sólo en el último decenio a 40.000 personas muertas, la mayoría civiles y más de dos millones de desplazados, según cifras de Organizaciones No Gubernamentales (ONG).
"La intensificación del conflicto armado interno en los últimos años ha producido un fuerte incremento de las acciones armadas de los diversos grupos enfrentados y ha aumentado la extensión territorial de las hostilidades", dijo un informe de la Red de Solidaridad Social, organismo de la Presidencia.
Carmen, de unos 25 años, ojos color miel y piel trigueña pero resquebrajada por el sol, salió hace un año de su pueblo desde -del cual no quiso revelar el nombre por temor- tras ver cómo su esposo fue asesinado por guerrilleros izquierdistas.
En el conflicto colombiano también participan paramilitares de ultraderecha y fuerzas gubernamentales de seguridad.
"El problema es tan grande, que supera a cualquier Estado", dijo Isabel Selles, funcionaria de asuntos comunitarios de la ACNUR.
Un informe de esta organización reveló que los paramilitares, agrupados en las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), son responsables del 49,3 por ciento de los desplazamientos del país, las guerrillas del 19,7, otros autores del 22 por ciento y las Fuerzas Armadas del 1,18 por ciento.
Sin embargo, expertos estiman que las cifras pueden quedar cortas frente a la realidad, pues hay muchos refugiados en los cascos urbanos que no son censados porque contaron con la suerte de conseguir un empleo.
MIGRACION CRECIENTE
Los desplazados de Colombia también se han dirigido hacia países vecinos, como Venezuela, Ecuador, Panamá y Perú, a donde toman rumbo en busca de ser recibidos como refugiados.
Pero las ONGS temen que el desplazamiento sólo se quede en número. "Si no hay cifras parece que el problema no existe. Pareciera que el desplazado es una masa amorfa, y no es así", sostuvo Selles.
De acuerdo con el ACNUR, el fenómeno del desplazamiento en Colombia creció 48 por ciento en el 2001 con relación al 2000.
Y la tendencia ascendente se mantiene para los próximos años por el temor de un recrudecimiento del conflicto armado, tras el rompimiento reciente del infructuoso proceso de paz que llevó a cabo por tres años el gobierno con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"La ruptura de los diálogos con las FARC en febrero del 2002 ha supuesto un cambio de escenario, que apunta a un panorama de mayor desplazamiento y agudización de la crisis humanitaria", señaló el ACNUR.
También hay temores de que el plan del presidente electo, Alvaro Uribe -caracterizado por su línea dura contra la guerrilla-, de duplicar la fuerza publica e invertir 1.000 millones de dólares adicionales al año en la guerra, incremente el conflicto armado y con ello el problema de desplazamiento.
Ello contribuye al explosivo nivel de desempleo que azota al país, de 18,3 por ciento hasta abril, en una nación donde el 60 por ciento de la población vive en la pobreza.
Adicionalmente la economía de este país está en un proceso de desaceleración que la llevó a expandirse en un tímido 0,50 por ciento en el primer trimestre del 2002, y los analistas esperan que crezca por debajo del 2,0 por ciento en todo el año.
Mientras, Carmen seguirá buscando su sustento y el de sus pequeños en las calles de Bogotá, descartando de tajo volver a su parcela.
"¿A qué vuelvo, a que nos maten? , no gracias. Parece que va a escampar rápido, mejor sigo trabajando", concluyó.