Arafat ausente en festividades de Navidad en Belén

BELEN.--- - Belén inició las festividades de la Noche Buena en un ambiente ensombrecido por la violencia, después que Israel prohibió al líder palestino Yasser Arafat visitar el poblado, bajo gobierno palestino y considerado como el lugar de nacimiento de Jesús.
Israel dijo que mantendría su decisión de impedir que Arafat visitara Belén, a menos que el presidente de la Autoridad Palestina arrestara de inmediato a los responsables por el asesinato de un ministro israelí.
El anuncio de Israel fue seguido por una emboscada en Cisjordania en la que un colono israelí resultó herido de gravedad por un grupo de palestinos armados cerca de la ciudad de Naplusa.
Un grupo ligado a la facción Fatah de Arafat se atribuyó la responsabilidad e indicó que uno de sus hombres murió en el intercambio de disparos que siguió al ataque, ocurrido ocho días después que Arafat hizo un llamado para poner fin a los atentados contra israelíes.
Un miembro del grupo, las brigadas Al-Aqsa, dijo a Reuters: "Estamos expresando nuestra ira a la decisión de (el primer ministro Ariel) Sharon de impedir que Arafat saliera de Ramallah hacia Belén".
Tropas israelíes, buscando impedir que Arafat saliera en secreto, detuvieron e intentaron registrar una caravana de líderes religiosos cristianos que viajaba a Belén tras visitar al presidente palestino en la ciudad cisjordana de Ramallah.
El líder palestino de 72 años dijo antes que asistiría a las festividades de la víspera de Navidad en Belén, como lo ha hecho desde que la ciudad pasó a control de los palestinos en 1995, aunque tuviera que ir caminando desde Ramallah.
Sin embargo, al inicio de los rituales religiosos el lunes en Belén, Arafat sólo estaba presente en los carteles que colgaban de las paredes de la histórica Plaza del Pesebre y en los afiches que llevaban miles de palestinos reunidos en la explanada.
El alcalde de Belén, Hanna Nasser, dijo que la prohibición era una "medida irracional e innecesaria" y "prueba clara de que los lugares santos no son libres".
Israel dijo el domingo que decidió impedir el viaje de Arafat a Belén, mediante el bloqueo de carreteras en Cisjordania con tanques y tropas, porque no había "desmantelado las organizaciones terroristas palestinas".
Este fue un claro intento de dar otro golpe simbólico a Arafat. Israel recientemente calificó de "irrelevantes" los esfuerzos de Arafat para poner fin a 15 meses de violencia, pero Estados Unidos y gran parte de la comunidad internacional se han opuesto a la declaración.
El Vaticano, mientras tanto, expresó su rechazo a la prohibición para que Arafat viajara a Belén, que consideró como "impuesta arbitrariamente", y dijo que había intentado convencer a Israel para que la levantara.
"A fin de tratar de crear un clima más conciliatorio en el área, la secretaría de Estado ha dado un paso diplomático para tratar de evitar esta prohibición, que fue impuesta arbitrariamente", dijo el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro Valls.
Pero una alta fuente política israelí dijo que la prohibición sólo sería levantada si Arafat "arresta a las personas involucradas en el asesinato (del ministro de Turismo Rehavam Zeevi) que están en Ramallah esta noche".
El Frente Popular para la Liberación de Palestina se atribuyó la responsabilidad por el asesinato de Zeevi en octubre, para vengar la muerte de su líder a manos de fuerzas israelíes.
SOLIDARIDAD CON ARAFAT
El Patriarca Latino Michel Sabbah, el primer palestino que actúa como el principal representante de la Iglesia Católica en Tierra Santa, encabezó a una delegación de religiosos en una visita a Ramallah para expresar su respaldo a la intención de Arafat de viajar a Belén.
"La dignidad del presidente del pueblo palestino es la dignidad de cada palestino musulmán y cristiano", dijo Sabbah, un enérgico defensor de los derechos de los palestinos.
Tras la reunión, Arafat dijo a los reporteros: "Enviamos nuestro mensaje al mundo entero de que nadie puede humillar al pueblo palestino".
A la salida de Ramallah, la caravana de Sabbah fue detenida en un puesto de control del ejército israelí y se ordenó a los ocupantes de los automóviles bajar de los vehículos antes de que se les permitiera seguir hacia Belén, dijeron fuentes palestinas.
El ejército israelí dijo que se trató sólo de una revisión de seguridad rutinaria.