APASIONA JUEGO INTERNET SOBRE ENFERMEDAD DE PRESIDENTE RUSO
Un nuevo juego virtual que permite curar o dejar morir en el hospital al presidente Borís Yeltsin según se le den medicinas o vodka, apasiona a los internautas de Rusia. <BR>Versión ampliada del juguete japonés "tamagochi", en el que los niños ...
Un nuevo juego virtual que permite curar o dejar morir en el hospital al presidente Borís Yeltsin según se le den medicinas o vodka, apasiona a los internautas de Rusia.
Versión ampliada del juguete japonés "tamagochi", en el que los niños pueden cuidar y alimentar a una criatura, el juego "Hospital Online" recoge los más sonados tópicos del Kremlin.
Calificado por uno de los participantes de "divertido, cínico y triste", el juego presenta a Yeltsin como el único paciente de este hospital virtual, en el que el jugador es su médico de cabecera.
Si el alcohol le provoca al paciente una subida repentina de la tensión, ésta puede ser compensada, según las preferencias del médico, con una dosis de nitroglicerina o la destitución del Gobierno, que suele tener efecto "tranquilizador".
El jugador puede permitir a Yeltsin "trabajar con documentos" o "leer la prensa", y compensar la pérdida de energía vital mandándole "charlar con el amigo Bill" o el "amigo Helmut", en alusión al presidente de EEUU y el ex canciller alemán.
Las actividades políticas, como presentar un candidato a primer ministro al Parlamento opositor, augura problemas de tensión y aceleraciones peligrosas del pulso, pero pueden ser contrarrestados con créditos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los mensajes a la nación por televisión tienen efecto favorable, pero descubrir la realidad del país mirando la tele puede agravar el estado del paciente y obligar a recetarle vitaminas o una lavativa de hasta 20 litros.
Si el estado del enfermo es estable, se le permite jugar al tenis -no más de diez raquetazos- o hasta diez minutos de aerobic, pero habrá que tener a mano el oxígeno o la morfina, por si le da una "pájara".
Eso sí: mucho cuidado con la penicilina, pues su combinación con el vodka puede dejar a Yeltsin en estado de coma.
Suele tener efecto favorable el tratamiento combinado, como tomar una dosis de nitroglicerina, acariciar un gato, ponerse la mascarilla de oxígeno, hablar por la tele, obtener un crédito del FMI y, como elixir milagroso, destituir al Gobierno.
El peligro está en que el jugador que haya decidido resucitar al Presidente ruso puede tropezar con la intervención de otros internautas, más maliciosos y capaces de acabar con el paciente.
Por ejemplo, recetándole varias citas con Mónica Lewinsky, pues Borís, con más años e historial médico que su "amigo Bill", no aguanta las diez citas permitidas y puede morir a la tercera.
Al estudiar el historial médico, se descubre que el vodka es el remedio más frecuente que suelen recetarle a Yeltsin, tal vez por su conocida afición, y en caso de pasarse de la raya aparece en la pantalla su imagen con la inscripción: "`ya no puedo más!"
En una ventanilla, un "Consejo Médico" integrado por los "doctores" que han jugado presenta los más diversos comentarios sobre el paciente, algunos marcadamente agresivos y otros de carácter más condescendiente.
Según "El Patriota", Yeltsin "es un criminal de Estado que debe ir a los Tribunales, y no al hospital", mientras que Iván "El Destripador" sugiere "practicarle una sangría".
Entre los benevolentes "Dima", que lamenta que el líder ruso "se haya degradado tanto".
La dirección en el Internet para jugar al "Hospital Online" es http://hol.da.ru