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Incertidumbre por exploración de hidrocarburos en el Magdalena

La Agencia Nacional de Hidrocarburos estructura un proyecto para la búsqueda de yacimientos en 167.000 hectáreas de tierra de ese departamento.

Incertidumbre por exploración de hidrocarburos en el Magdalena

Incertidumbre por exploración de hidrocarburos en el Magdalena / COLPRENSA

Santa Marta

En una reunión desarrollada entre la Agencia Nacional de Hidrocarburos y la Gobernación del Magdalena se conoció que siete municipios de este departamento, ubicado en la región Caribe de Colombia, son interés de grandes empresas y el Estado por la posible presencia de yacimientos de hidrocarburos, por lo que se está estructurando un proyecto de exploración.

De acuerdo con Luis Miguel Morelli, presidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, se trata de un ejercicio de exploración que podría darse en una zona denominada Valle Inferior del Magdalena -VIM22-, que comprende 167.000 hectáreas de tierra.

“Hemos tenido una acogida muy importante, nos da apoyo y respaldo, y sobre todo ese deseo de trabajar de manera articulada entre la Agencia Nacional Hidrocarburos y la Gobernación del Magdalena, con el liderazgo de la gobernadora Cotes”, dijo Morelli luego de la reunión realizada en Santa Marta y que ha despertado la preocupación de la comunidad.

Ver también: Gobierno sale en la búsqueda de nuevos yacimientos de gas y petróleo

De acuerdo con lo conocido, los municipios que hacen parte del proyecto Valle Inferior del Magdalena en esta zona del país son: Plato, Santana, San Zenón, San Sebastián, Guamal, Nueva Granada y Pijiño del Carmen.

“Nos enteramos de que el sector cuenta con una cantidad de hectáreas ricas en esos elementos y que hay unas empresas que quieren explotarlas, pero no han hecho una socialización con nosotros en las fincas, no nos han explicado de qué se trata y qué consecuencias va a tener”, asegura Atilano Mendoza, un campesino del centro del departamento de Magdalena.

Para los habitantes de la zona rural de las poblaciones de interés para el proyecto, la exploración genera un riesgo de desplazamiento de miles de familias.

“Eso seguramente va a generar contaminación, tenemos ahí pocas fuentes hídricas y que tal que resulten afectadas, sabemos que las minas traen beneficios como empleos, pero nosotros hemos sido víctimas de desplazamiento forzado y aunque hoy no tenemos facilidad para cultivar en grandes proporciones esos terrenos, por nuestras condiciones económicas, esa es nuestra casa y detrás de las minas vienen cosas que perjudican, no sabemos si nos va a tocar abandonar el sector o si vienen grupos ilegales también a interesarse por esas exploraciones”, agrega Atilano Mendoza.

De acuerdo con la Agencia Nacional de Hidrocarburos, actualmente la exploración está en socialización con entes regionales, locales y entidades pertinentes de cada territorio, fase que debe darse ante de la adjudicación por orden de la Corte Constitucional y lo que se está explicando es la ficha técnica, ambiental y social del proyecto.

Al parecer, las hectáreas que componen el Valle Inferior del Magdalena quedan sobre el Cinturón Plegado de San Jacinto, área que tiene contantes actividades sísmicas y está bañada por el río Magdalena, lo que la harían rica en compuestos orgánicos.

 

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