Abogado se habría apropiado ilegalmente de lote en Barú, que perteneció a Justo Pastor Perafán
A la cárcel este jurista por falsificar documentos para apropiarse de tierras de Barú en custodia de la Fiscalía
Cartagena de Indias
Un abogado investigado porque al parecer presentó documentos falsos para apropiarse de un lote de casi 250 mil metros cuadrados en la Isla Barú, frente a Cartagena de Indias, que está en custodia de la Fiscalía, fue enviado a la cárcel con medida de aseguramiento.
El predio, que perteneció al narcotraficante Justo Pastor Perafán, había sido entregado por la Dirección Nacional de Estupefacientes, el 20 de junio de 1996, a la Fiscalía como medida cautelar durante un proceso.
La Fiscalía General de la Nación Seccional Bolívar cobijó con medida de aseguramiento consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario al abogado Juan Manuel Lara Ligardo por los delitos fraude procesal y falsificación de documento público y privado.
El detenido presentó desde el año 2003 documentos para que Carlos del Cristo Leottau Rodríguez, policía destituido y con detención domiciliaria por otro proceso, se apoderara de El Bongo, una franja de tierra de 247.995 metros cuadrados en el corregimiento de Barú, en Cartagena de Indias.
Al parecer, Lara Ligardo falsificó un documento con fecha del 8 de abril del 2011, en el que un juzgado de Bogotá habría ordenado a la Alcaldía de Cartagena que hiciese un procedimiento de lanzamiento del predio en beneficio de Leottau, que según el documento apócrifo es el propietario.
Ante la denuncia hecha por Alfonso Franco Bedoya --gerente de la empresa Vigía del Caribe, encargada de la celaduría del lote-- la Fiscalía comenzó la investigación así como a verificar que los documentos presentados por el abogado fueran legales.
La denuncia de Franco indica que al lote llegaron unos hombres y obligaron a salir a los vigilantes que la empresa había asignado. Ante el hecho, la Fiscalía pidió al despacho jurídico de la Alcaldía que buscara en el archivo el documento en el que ordenaban el desalojo, pero no estaba. A la vez, cuando se requirió al juzgado bogotano por el procedimiento emitido, desde la capital de la República confirmaron que la persona que firmaba como juez nunca había trabajado en ese despacho.
Lara Ligardo también presentó una escritura de posesión falsificada con fecha del 16 de mayo de 2013 de la Notaría Séptima de Cartagena como prueba de que Leottau Rodríguez era el propietario del terreno.
Entre lo presentado por el abogado aparece también una sentencia del 2 de mayo de 1988 proferida por el Juzgado Segundo Civil del circuito en la que dice que el terreno fue adquirido por otra persona y que hay una inscripción extraordinaria adquisitiva de dominio de inmueble. Existe también una decisión en sentido similar de la Sala Penal del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Cartagena. La investigación permite concluir también son falsas.
En la decisión, la Fiscalía también señaló como fraudulentos los testimonios de tres personas, uno de ellas que no sabe leer ni escribir. Según sus versiones al ente acusador, a dos de ellos los llevaron con engaños a firmar las declaraciones extrajudiciales diciéndoles que eran contratos laborales, mientras que realmente en los documentos aseguraban que Carlos del Cristo era el dueño de El Bongo.
El tercero, Ángel Custodio Medrano, de 76 años, nunca se retractó de su versión en la que indicaba que Carlos del Cristo era el dueño desde hacía 20 años. El pasado 15 de marzo fue detenido y recluido en la cárcel San Sebastián de Ternera, pero por su colaboración a la justicia, la Fiscalía le cambió la medida y ahora tiene detención domiciliaria.
El 15 de marzo de 2016, el ente acusador también dictó medida de aseguramiento contra Leotau Rodríguez por estos hechos. El expolicía tiene detención domiciliaria por extorsión.
La Fiscalía cobijó con medida de aseguramiento en la cárcel San Sebastián de Ternera a Lara Ligardo para garantizar la comparecencia del sindicado, impedir su fuga, que continúe en su actividad delictiva y que eventualmente emprenda labores para destruir o deformar los elementos probatorios importantes del caso.