Leonor Espinosa: la chef que convirtió la biodiversidad colombiana en alta cocina
La cocinera colombiana convirtió los ecosistemas del país en una experiencia gastronómica única.
Leonor Espinosa | Foto: Andrés Cardona, El País
Leonor Espinosa, de 62 años, es hoy una de las voces más influyentes de la gastronomía mundial, pese a nunca haber estudiado cocina. Su mirada artística, formada en Bellas Artes y su comprensión profunda del territorio colombiano han convertido su propuesta culinaria en un manifiesto sobre biodiversidad, memoria y cultura.
Esa visión la llevó a ser elegida Mejor Chef del Mundo por The World’s 50 Best Restaurants y a recibir premios como el Sferic Award y el Basque Culinary World Prize, reconocimientos reservados para quienes innovan desde la ciencia, el territorio y el impacto social.
Entrar a Leo, su restaurante en Bogotá, es ingresar a un relato vivo sobre Colombia. Su menú Ciclo-Biomas-Restaurar presenta especies poco vistas en grandes ciudades, arawanas, pianguas, seje, cacay o mojojoy, junto a animales de crianza y productos tradicionales que revela como parte de un ecosistema biológico y cultural.
Cada plato es una pieza de investigación y una intervención artística.
El origen de una mirada: del arte y la economía a la cocina
La historia de Espinosa es tan inusual como su cocina. Fue artista, estudiante de Economía y cocinera autodidacta. Su relación con la gastronomía nació en La Candelaria, cuando empezó a recrear los sabores de Sucre que guardaba de su infancia.
La mezcla de intuición, lectura, experimentación y su fascinación por las culturas asiáticas terminó abriéndole un camino que nunca había imaginado.
Su primer restaurante, en Barranquilla, fue un fracaso, pero la llevó a insistir. De regreso a Bogotá, trabajó en cocinas reconocidas, diseñó menús y poco a poco consolidó un lenguaje propio.
En 2005 abrió Leo Cocina y Cava, donde entendió que la innovación debía venir del territorio. Las expediciones culinarias que emprendió por el Pacífico, el Caribe y la Amazonía definieron su filosofía: la biodiversidad y las comunidades como fuente creativa.
Una cocina que une territorio, ciencia y arte
Espinosa convirtió la investigación gastronómica en una forma de activismo cultural. Su método combina biología, antropología, arte y economía para rastrear el origen de cada ingrediente y la tradición que lo rodea. “La cocina es un lenguaje”, dice, y cada plato busca revelar la relación entre la naturaleza, quienes la habitan y los saberes que la sostienen.
En 2021, su restaurante se trasladó a Chapinero Alto y concentró aún más esa narrativa. Allí, su hija, Laura, extendió esa exploración a las bebidas con fermentados, hidromieles y preparaciones que cuentan historias de origen.
Funleo: cuando la cocina transforma a las comunidades
Convencida de que el trabajo culinario debía traducirse en desarrollo, Espinosa creó en 2008 la Fundación Leo Espinosa (Funleo). Desde entonces ha impulsado más de 140 talleres, cientos de alianzas comerciales entre productores rurales y restaurantes urbanos, y proyectos de nutrición y soberanía alimentaria en territorios históricamente excluidos.
Su impacto fue reconocido en 2017 con el Basque Culinary World Prize, que premia a chefs que transforman comunidades a través de la gastronomía.
Su enfoque: entender el territorio como un cuerpo vivo y reconocer la biodiversidad como una oportunidad económica y cultural para las comunidades que la han conservado.
Una voz global que redefinió la cocina colombiana
Para Espinosa, la cocina no es solo sabor: es identidad, ciencia y memoria. Su trabajo ha sido clave para posicionar a Colombia como un epicentro gastronómico basado en la diversidad biológica y cultural.
“Construir una narrativa desde la biocultura permitió que el mundo mirara a Colombia buscando autenticidad”, explicó.
Hoy, mientras sigue explorando el país a través de sus “inmersiones geográficas”, Espinosa sostiene que su misión es revelar la belleza del territorio y demostrar que la biodiversidad y la herencia de las comunidades pueden transformar vidas, cocinas y economías.