Nuevo parque solar en Norte de Santander generará energía para más de 32 mil personas
Colombia impulsa su transición energética con la entrada en operación de Pétalo del Norte I, el primer proyecto de Climate Fund Managers (CFM) en América Latina y el de mayor capacidad desarrollado por Erco Energía

Nuevo parque solar en Norte de Santander generará energía para más de 32 mil personas // Caracol Radio
Colombia continúa fortaleciendo su sistema energético con la entrada en operación de Pétalo del Norte I, el primer proyecto comercial de Climate Fund Managers (CFM) en América Latina y el parque solar de mayor potencia desarrollado hasta ahora por Erco Energía. Ubicado en La Esperanza, Norte de Santander, e implementado por Andina Solar, este proyecto se consolida como un referente regional en innovación, eficiencia operativa y cooperación internacional para la transición energética.
De acuerdo con Diana Corzo, gerente del proyecto en Andina Solar, este avance demuestra “la madurez del ecosistema solar colombiano” y evidencia que la articulación entre inversión, desarrollo y construcción puede entregar resultados concretos en los tiempos previstos. Su éxito, afirma, representa un modelo replicable en futuros desarrollos solares del país.
Una apuesta energética que diversifica la matriz y fortalece la resiliencia del sistema
Con una capacidad instalada de 19,9 MW, Pétalo del Norte I produce más de 43 GWh de energía limpia al año, suficientes para abastecer a más de 32.000 personas y evitar la emisión de 13.000 toneladas de CO₂.Este aporte es estratégico para un país cuya matriz energética depende históricamente de fuentes hídricas, especialmente en un contexto de variabilidad climática. El proyecto ayuda a garantizar estabilidad y seguridad energética en una región con alto potencial solar como el nororiente colombiano.
Financiamiento innovador: cooperación internacional que impulsa energías limpias
El proyecto destaca por su modelo de financiamiento combinado (blended finance), en el que CFM actúa como inversionista, utilizando fondos públicos europeos para reducir riesgos y movilizar una inversión privada significativamente mayor.Erco Energía participa como desarrollador y contratista; Andina Solar lidera la gerencia del proyecto; y la Unión Europea figura como cofinanciador estratégico.
Para Alberto Menghini, jefe de Cooperación de la UE en Colombia, este modelo financiero es clave dentro de la agenda Global Gateway: “permite movilizar capital privado hacia iniciativas transformadoras como Pétalo del Norte I, que contribuyen a diversificar la matriz energética, generar empleo local y apoyar los objetivos climáticos globales”.
Impacto social: empleo, desarrollo comunitario y equidad de género
Más allá de la generación eléctrica, Pétalo del Norte I ha tenido un impacto directo en la comunidad. Durante su construcción se crearon 270 empleos, de los cuales 64 % fueron ocupados por población local y 30 % por mujeres, cifras que superan la media de participación femenina en el sector energético.
Además, se ejecuta un Programa de Desarrollo Comunitario de USD 125.000, que beneficia a más de 2.400 habitantes de las veredas La Pedregosa, La Fragua, La Raya y Palmichal.Las iniciativas incluyen fortalecimiento del deporte, liderazgo, infraestructura comunitaria, equidad de género y emprendimiento rural.
Según Juan Páez, Head of Latin America en CFM, la decisión de elegir a Colombia como sede de su primer proyecto operativo en la región se debe al potencial del país para acelerar la diversificación energética basada en nuevas tecnologías.
Un paso decisivo hacia el futuro energético de Colombia
Para Juan Camilo López, CEO de Erco Energía, este proyecto representa una visión estratégica: ampliar la generación solar para fortalecer la resiliencia y seguridad del sistema eléctrico colombiano. La cooperación entre CFM y Erco, señala, demuestra cómo la unión de experiencia local con inversión internacional acelera la transición energética mientras genera beneficios económicos y sociales duraderos para las comunidades.
Pétalo del Norte I no solo marca el inicio de una nueva plataforma solar, sino que también abre la puerta a la expansión de modelos innovadores de financiamiento climático en diferentes regiones del país.Con proyectos como este, Colombia reafirma que la transición energética está avanzando desde los territorios y que el futuro del país será más sostenible, resiliente y eficiente.



