El ‘Cartel de la Toga’ es el episodio más reprochable y de traición en la justicia colombiana: Corte
El Tribunal reprochó los actos de corrupción en los que incurrieron sus magistrados y ratificó sentencias contra Malo y Ricaurte.
Los procesos pendientes en el Cartel de la Toga / gettyimages
JUSTICIA
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia ratificó la condena contra el exmagistrado Francisco Javier Ricaurte Gómez y aprovechó para hacer un duro llamado a aquellos que traicionaron el sistema de justicia colombiano por medio de actos de corrupción para fovorecer a aforados en el escándalo conocido como “El Cartel de la Toga”.
El magistrado Carlos Solorzano, en la lectura de fallo contra Ricaurte, ratificó que este episodio es quizás el más reprochable de la historia de la administración de Justicia en Colombia.
No obstante, la Sala reconoció que en medio de estos hechos de corrupción, el Estado ha demostrado su fortaleza institucional al juzgar severamente a todos aquellos que acturaron contra a la ley.
“Así, aun frente a episodios tan lamentables como los referidos en este proceso, el Estado ha dado muestra de su fortaleza institucional. La Constitución y la ley vinculan a todos, indistintamente de la jerarquía institucional que lleguen a ostentar. Esa lamentable secuencia (...) contraría la forma transparente, esforzada y silenciosa en la que los Administradores de Justicia atienden su misión en cada rincón de Colombia”, indicó el magistrado, Carlos Solorzano.
Para la Corte quedó demostrado que existió una organización criminal, liderada, entre otros, por Ricaurte Gómez y Luis Gustavo Moreno Rivera.
“Que se concertó con vocación de permanencia en el tiempo para cometer delitos en el seno de la máxima institución de la justicia y que pretendió, bajo ese cometido y a cambio de ingentes sumas de dinero, entorpecer procesos seguidos contra aforados”,se lee en el fallo que ratifica las condenas de 16 y 9 años respectivamente.
Recordemos que, la Sala compulsó copias a la Fiscalía para que determine, la procedencia o no, de la extinción de dominio sobre aquellos bienes de los procesados.
