Laura Silva, concejal de Tunja, recibió una amenaza
La concejal puso en conocimiento de la fiscalía la situación y apela a que la amenaza va dirigida a ella por el trabajo de denuncias y seguimiento que ha realizado desde su curul.
«Pero yo creo que si nos están amenazando es porque algo de lo que estamos haciendo, lo estamos haciendo bien».
El miércoles 16 de octubre, mientras Laura Elena Silva se encontraba en el Concejo Municipal, su hermano le contó que le había llegado un papel. Era una amenaza.
«Sí, mi hermano estaba en mi vivienda y recibió la contratación de un lote mortuorio a mi nombre, firmado con una firma falsificada del Grupo Recordar (empresa funeraria) aquí de Tunja»
La alerta fue inmediata y la sala del concejo se llenó de policías. La concejal puso en conocimiento de la fiscalía la situación y apela a que la amenaza va dirigida a ella por el trabajo de denuncias y seguimiento que ha realizado desde su curul.
«Especulativamente, puede que las informaciones que estamos abordando los concejales sobre diferentes temas álgidos como el del Colboy (Colegio de Boyacá), pueden que toquen sensibilidades que no entendemos, pero vamos a ver qué dice la fiscalía»
La concejal menciona que en la ciudad hay una persecución frente a las personas que ejercen cargos políticos, además de reconocer que las razones para que los concejales reciban este tipo de amenazas son por su trabajo. Hay que recordar que la concejal Sandra Estupiñán también recibió amenazas en el primer semestre de este año.
«Lo que hay que decir es que hay mucha violencia política en esta ciudad que no está justificada, los concejales estamos haciendo una mirada a temas como el empréstito o a temas de inversión de la administración pasada que no fueron ejecutados de la mejor manera posible y que en este momento la nueva elección de la mesa directiva del Concejo también tiene la responsabilidad de abrir el concurso para el contralor que también permita avanzar en estas investigaciones, entonces, yo solo soy una concejal incómoda, yo sé que es difícil que una ciudad que ha sido tan cooptada históricamente de forma política este con unos intereses muy privados y que nosotros en nuestras búsquedas podamos pisar algunos de esos intereses que deben revelarse».
Finalmente, la concejal apunta a que las amenazas son producto del trabajo bien hecho.
«Pero yo creo que si nos están amenazando es porque algo de lo que estamos haciendo, lo estamos haciendo bien».