Deshielo Ártico puede causar una crisis tóxica en la salud humana
Investigadores estadounidenses alertan que la liberación del mercurio del permafrost afectará toda la cadena alimentaria, intoxicando a consumidores desde peces hasta seres humanos.
Un estudio publicado en la revista IOP Science y desarrollado por investigadores de la Universidad del Sur de California advierte que el calentamiento global y aumento de temperatura causará el deshielo del permafrost, lo que resulta en la liberación de distintas sustancias que han quedado atrapadas en el suelo ártico.
En la revisión y estudio de sedimentos y ríos en Alaska, los investigadores descubrieron que la erosión y deshielo del permafrost hace que se libere mercurio y este termina asentado en los sedimentos de los ríos y mares.
El problema
Le interesa
Regularmente, la circulación de la atmósfera del planeta traslada los contaminantes a altas latitudes, lo que causa que se acumulen estas sustancias, como el mercurio, en el Ártico. Su deshielo hace que el metal tóxico se libere y regrese a otras zonas del planeta y perjudique la salud de la vida animal y vegetal.
La liberación de esta sustancia tóxica llega a peces que luego son consumidos por la humanidad, en primera instancia por las comunidades que viven en la zona cercana al Ártico y que subsisten mediante la pesca.
“Bomba de mercurio”
Josh West, coautor del estudio y profesor de Ciencias de la Tierra y Estudios Ambientales en la USC, alerta que “podría haber una bomba gigante de mercurio en el Ártico a punto de explotar” considerando que la región ha acumulado más mercurio que los océanos, suelos, atmósfera y biósfera juntos.
Aunque las cantidades de mercurio liberadas actualmente no suponen una amenaza tóxica amplia, se espera que con el tiempo se libere más de esta sustancia y aumente la exposición al mismo, lo que perjudicará aun más la salud de la población.