Carnets y multas: Disidencias imponen reglas en Caquetá para controlar la población
Se trata de “cartillas políticas”, en las que las disidencias dan una serie de ordenes a la población, de no cumplirlas, anuncian represalias.
Caracol Radio conoció un documento que ha generado preocupación en las comunidades de Doncello, Caquetá. El bloque Rodrigo Cadete de las disidencias de las FARC, emitió un conjunto de órdenes intimidatorias dirigidas a la población local. Estas normas buscan imponer un rígido control sobre diversas actividades en la región.
Entre las órdenes destacadas en el documento se encuentran:
- Prohibición del expendio de licores y cigarrillos: Los negocios deben colocar los avisos correspondientes, ya que no pueden vender a menores de 16 años.
- Horarios de cierre: entre semana hasta las 10:00 PM y los fines de semana hasta las 2:00 AM. “Se requiere que el volumen sea moderado”, se lee en el documento.
- Orden post-evento: los negocios deben tener bodegas para evitar desórdenes y canastas en las vías.
- Jornadas comunitarias: cada caserío debe realizar un día de embellecimiento comunitario al mes.
- Regulación de trabajadoras sexuales: deben presentar carnet de control médico, prohibido el exhibicionismo y el desplazamiento fuera de su lugar de trabajo.
Además, el documento menciona la emisión de carnets comunales con vencimiento de seis meses para controlar la identidad de los residentes. Aseguran que las visitas familiares deben ser breves, y se prohíbe el uso de sustancias psicoactivas, con la amenaza de medidas severas por parte de la organización para quienes no cumplan.
Este grupo armado asegura que cada vereda tiene que hacer una jornada comunitaria mensual sin excepción, sobre puentes, zanjas y tapadas de huecos para el sostenimiento de las vías y deben aportar económicamente.
“El que tenga más aportara más y el que tenga menos aportara menos basado a su condición de vida”, afirman.
Las disidencias también han impuesto horarios de movilidad y han dado indicaciones para la creación de huertas caseras administradas por los mismos residentes.
La gravedad de la situación ha llevado a las autoridades a tomar acción. El documento está en manos de las fuerzas de seguridad, que están evaluando las medidas necesarias para proteger a la comunidad de Doncello y asegurar la aplicación de la ley en la región.