Ejercicios efectivos para eliminar la grasa de la espalda después de los 40 años

El cuerpo de las personas va cambiando dependiendo de la etapa de la vida en la que se encuentren, y a la par, se deben variar los hábitos para cuidar de este. Si en los últimos años la persona llevó un ritmo de vida sedentario, junto a una alimentación poco saludable, tras cumplir los 40 puede presentar complicaciones para mantenerse en forma.

Además, es común que en esta edad la masa muscular comience a disminuir, por lo que es necesario ajustar el estilo de vida a la nueva etapa que se encuentra atravesando.

En el caso de las mujeres, es común desear eliminar la grasa o los “rollitos” de la espalda, junto a la flacidez de los brazos. La recomendación principal para estos casos es alimentarse de manera balanceada, consumir agua todos los días y realizar ejercicio de manera constante.

A continuación, le compartimos una serie de ejercicios que podrá realizar si desea tonificar su espalda luego de cumplir los cuarenta.

Rutinas de cardio

Una de las maneras más eficaces para quemar grasa es por medio de rutinas de cardio. Entre las más comunes, se destacan salir a correr, el ciclismo o realizar aeróbicos. Se recomienda que estas sesiones tengan una duración, como mínimo, de cuarenta minutos tres veces a la semana.

Planchas

Para este ejercicio, las personas se deben ubicar boca abajo, doblando los codos noventa grados y alineándolos con los hombros. De esta manera, se apoya el peso del cuerpo únicamente en los antebrazos y en los pies.

Las planchas son un ejercicio que cuenta con una serie de variaciones. Por ejemplo, si la persona no lleva mucho tiempo haciendo ejercicio, puede realizar una serie de cinco repeticiones en la que permanezca durante un minuto en la posición inicial, descansando la misma cantidad de tiempo y repitiendo el proceso.

Este ejercicio fortalecerá tanto la zona lumbar, es decir, la espalda, como los músculos abdominales.

Extensión de espalda

Si desea realizar este ejercicio debe encontrarse acostado boca abajo sobre el suelo, puede ser en una colchoneta o un tapete especializado para este tipo de rutinas. Para comenzar, es necesario llevar las manos hacia la sien, con los codos extendidos a los lados.

Luego, se deben contraer los glúteos y el tronco, levantando los hombros y el pecho del suelo, apretando los omóplatos, es decir, los huesos triangulares que se encuentran en la parte trasera del hombro.

Se recomienda levantar la cabeza al mismo tiempo, apuntando hacia arriba y estirando la espalda.  Finalmente, se debe descender lentamente hasta volver a la posición inicial. Este ejercicio se puede realizar en cuatro series de 15 repeticiones cada una.

Balanceo de mancuernas

Para realizar este ejercicio debe tener una mancuerna cuyo peso no sea exagerado. La persona se debe ubicar con los pies separados a la altura de los hombros, sujetando la mancuerna por uno de sus extremos con ambas manos.

Al momento de iniciar, la espalda debe encontrarse recta, luego es necesario doblar ligeramente las rodillas, empujar las caderas hacia delante y balancear la pesa entre las piernas.

En el momento en que la mancuerna se encuentre en el punto más alto, se deben contraer los glúteos, los cuádriceps y el tronco. Finalmente, el peso debe volver a ubicarse entre las piernas. Este ejercicio se puede realizar en cuatro series de 15 repeticiones cada una.