Israel rescata dos rehenes y deja un rastro de más de 167 muertos en Gaza
Israel anunció el lunes que liberó a dos rehenes de origen argentino en Rafah, el último objetivo de su ofensiva en la Franja de Gaza, donde Hamás afirmó que murieron alrededor de 100 palestinos en un bombardeo nocturno.
“En un operativo conjunto de las FDI (ejército), ISA (agencia de seguridad Shin Bet) y la policía israelí por la noche en Rafah, fueron rescatados dos rehenes israelíes, Fernando Simon Marman (60 años) y Louis Har (70)”, indicó un comunicado de los tres servicios.
El vocero de la presidencia argentina, Manuel Adorni, confirmó la información y la identidad de los dos liberados. “Las Fuerzas de Defensa de Israel rescataron a dos secuestrados argentinos que se encontraban en Rafah, Gaza”, indicó Adorni en su cuenta de X.
Por su lado, la oficina del presidente argentino Javier Milei, que hace unos días estuvo en Israel, agradeció en X a las fuerzas de seguridad israelíes “por haber culminado con éxito el rescate de los argentinos” Simon y Har.
Secuestrados en el kibutz Nir Yitzhak, los dos hombres fueron trasladados al centro médico Sheba, en Ramat Gan, y “están en condición estable”, dijo a periodistas Arnon Afek, director del establecimiento.
“Tres terroristas fueron abatidos en el edificio donde estaban retenidos”, informó el ejército israelí en un primer balance.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó a su ejército preparar una ofensiva sobre Rafah, en la frontera con Egipto, donde actualmente se concentra más de la mitad de la población de Gaza, según la ONU, lo que generó consternación en la comunidad internacional.
Hamás advirtió el domingo que tal ofensiva “torpedearía” cualquier acuerdo de liberación de rehenes en su poder en Gaza.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, bajo control del movimiento palestino, los ataques israelíes del domingo al lunes dejaron “alrededor de 100 muertos”.
Pero Israel afirmó que esos bombardeos no son parte de la ofensiva, sino de la operación de rescate de los dos rehenes, secuestrados en los ataques del 7 de octubre de Hamás en el sur de Israel, que desataron la actual guerra.
Más de cien rehenes
Los ataques de domingo a lunes alcanzaron 14 casas y tres mezquitas en diferentes partes de Rafah, según el gobierno de Hamás en Gaza.
Unas 250 personas fueron secuestradas en los ataques de Hamás del 7 de octubre. Una tregua de una semana en noviembre permitió liberar a 105 rehenes a cambio de la salida de 240 presos palestinos de cárceles israelíes.
Antes de la liberación de los dos rehenes, Israel calculaba que 132 personas seguían detenidas en Gaza y que 29 estarían muertas.
Rafah se convirtió en el último refugio para los palestinos, con 1,4 millones de personas arrinconadas en la frontera cerrada con Egipto, según la ONU, en su mayoría desplazados por la guerra de cuatro meses entre Israel y el movimiento islamista Hamás.
El presidente estadounidense, Joe Biden, exhortó el domingo a Netanyahu a “garantizar la seguridad” de la población palestina. A su vez, varios países advirtieron sobre una “catástrofe humanitaria” en caso de un asalto contra la ciudad abarrotada.
“La victoria está al alcance”, declaró Netanyahu a la cadena estadounidense ABC, tras calificar a Rafah como “el último bastión” de los “batallones terroristas de Hamás”. Afirmó que Israel dará “paso seguro a la población civil para que pueda irse”, sin decir dónde podrían resguardarse los civiles.
- Población atrapada -
“Yo no sé dónde ir” en caso de una ofensiva sobre Rafah, expresó Farah Mohammad, quien huyó de Ciudad de Gaza, en el norte del territorio. “No hay más un lugar para escapar”, declaró esta madre de familia de 39 años, quien hace un mes perdió todo contacto con su esposo.
“En las condiciones actuales”, Estados Unidos “no podrá apoyar una operación militar en Rafah debido a la densidad de la población”, indicó un alto cargo del gobierno de Biden, al destacar que la población civil “no tiene a dónde ir”.
El ataque de Hamás del 7 de octubre dejó más de 1.160 muertos, en su mayoría civiles, según un balance de AFP con base en datos israelíes.
En represalia, Israel prometió “destruir” al movimiento islamista que gobierno Gaza, al cual considera una organización terrorista. La ofensiva Israelí dejó más de 28.000 muertos en la Franja de Gaza, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del territorio.
Por otro lado, la policía y el ejército israelíes anunciaron haber matado el domingo a dos palestinos acusados de realizar ataques con cuchillo, uno contra un puesto de control policial en Jerusalén Este y el otro contra un soldado israelí en un puesto de control cerca de Belén, en Cisjordania ocupada.
A su vez, el Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina, que gobierna las zonas autónomas de Cisjordania, informó de un palestino de 35 años muerto por las fuerzas israelíes cerca de Belén.
El otro palestino, muerto en Jerusalén Este, tenía 15 años de edad, según la agencia oficial palestina Wafa.
Cerca de 1,7 millones de personas, de una población total de 2,4 millones en Gaza, han tenido que huir desde el estallido de la guerra, según la ONU, debido a la devastación en el territorio palestino bajo asedio israelí y sumido en una grave crisis humanitaria.
Muchos de ellos han sido desplazado varias veces, huyendo cada vez más al sur a medida que se extienden los combates.
Rafah, convertido en un campamento gigantesco, es el último centro urbano al cual el ejército israelí no ha incursionado, y es el principal punto de entrada de la ayuda humanitaria.La ayuda recibida ha sido considerada insuficiente para las necesidades de la población, amenazada en el invierno por la hambruna y las epidemias.