La transición verde será la gran solución contra la informalidad en América Latina
Un informe, desarrollado por la Cepal, OCDE, CAF y presentado por Prisa Media, explica como la financiación privada y la transición energética puede impulsar la economía del cuidado, la agricultura y la transición digital.
El desempleo aumenta la informalidad en Cúcuta.(Caracol Cúcuta)
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) desarrolló junto a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) el informe ‘América Latina: Perspectivas Económicas 2023, invertir en desarrollo sostenible’ que fue presentado por Prisa Media en Chile y con el que presentan estrategias, propustas y soluciones de inversión enfocada en el desarrollo sostenible para la región.
En una revisión inicial de la región, Adriana Arreaza, vicepresidenta de Conocimiento de CAF, explicó que “las empresas que suelen invertir en investigación y desarrollo son las grandes empresas y en América Latina predominan las empresas chicas y las empresas chicas en muchas ocasiones son informales, tienen poco capital humano y poco acceso a los mercados de crédito, lo que las aleja de invertir en investigación y desarrollo”.
Con base en ese análisis, los organismos desarrolladores del informe consideran que la región debe centrarse en reforzar y mejorar la inversión en cuatro puntos principales: la transformación digital, la salud y el sector de los cuidados, la agricultura y los sistemas alimentarios, y la transición verde.
José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario Ejecutivo de la Cepal, indica que mientras la “transformación digital puede contribuir a mejorar la productividad y la competitividad de la región, además de ser una vía para aprovechar el progreso tecnológico”, las industrias de servicios de salud y ciencias de la vida “pueden ayudar a incrementar la capacidad de resistencia y la preparación para futuras crisis sanitarias”.
Inversión extranjera como clave regional
Salazar-Xirinachs, resalta como en 2022 “los flujos de entrada de este tipo de inversión extranjera aumentaron un 55%, alcanzando casi los 225.000 millones de dólares, el nivel más alto en las últimas tres décadas”, es decir, Latinoamérica fue la región del planeta con mayor entrada de inversión extranjera directa, sumando el 4% del PIB de la región durante ese año.
Por su parte, Arreaza de la CAF recuerda que en la investigación “encontraron que la inversión extranjera directa y las empresas extranjeras tienen mayor productividad en todos los países de la región que las empresas domésticas. Por lo que, en ese sentido, la inversión extranjera puede tener un efecto jalonador para el resto del aparato productivo”.
Más de la mitad de estas entradas en 2022 se dirigieron a Brasil y México, mientras que Centroamérica experimentó un descenso del 11,9% ese año.
Las estrategias para que haya inversión en desarrollo e innovación
Según los autores del informe, América Latina y el Caribe no se puede conformar con la inversión extranjera, sino que debe lograrse que, a nivel público, haya señales para que haya un ‘mejor camino’ financiero. Por lo tanto, se debe “avanzar hacia sistemas fiscales más eficaces y progresivos, una gestión más eficiente del gasto público y de la deuda, y unos marcos fiscales más sólidos y sostenibles es esencial para ampliar la inversión pública en un contexto de espacio fiscal limitado”.
Con este objetivo en mente se plantean dos estrategias para ayudar a mejorar la entrada de recursos tanto públicos como privados para los objetivos de desarrollo:
El primero es el rol que juegan las instituciones financieras de desarrollo, ya que estas pueden ayudar a financiar a las pequeñas y medianas empresas que, en promedio, no han logrado satisfacer el 75% de sus necesidades de financiación.
Lo segundo, es desarrollar instrumentos de financiación innovadores, como “los bonos verdes, sociales, de sostenibilidad y ligados a la sostenibilidad”, ya que, actualmente, representan el 32% del total de emisión internacional de bonos de América Latina.
