Radio en vivo

Hora 20

Programas

Literatura: Homenaje a Milan Kundera y la correspondencia del Boom latinoamericano

Panelistas hicieron un recuento del impacto de la obra de Milan Kundera en la literatura universal. También hablaron de las revelaciones que trae el libro Las cartas del Boom.

Literatura: Homenaje a Milan Kundera y la correspondencia del Boom latinoamericano

Este viernes de Hora20 un homenaje a Milan Kundera, el escritor checo que murió esta semana en París. Se habló de su legado, de las reflexiones filosóficas que componían sus obras y del Nobel que nunca llegó. Después una mirada a una correspondencia, a unas cartas, a Las cartas del Boom latinoamericano que recoge el cruce de mensajes entre los autores de este movimiento. Por último, la obra de María Mercedes Carranza tras los 20 años de su muerte.

Milan Kundera, un novelista como él mismo se definió, murió esta semana, el 11 de julio en París a los 94 años. Vivió en el exilió desde 1975 en Francia cuando salió de su país de origen Checoslovaquia tras la ocupación soviética de 1968. Militante del partido Comunista, pero expulsado en 1948; la marca de la invasión soviética, la instalación de un régimen totalitario y la manera como la cultura de su país intentó ser borrada, se convirtieron en elementos de resistencia en la lucha cultural de Kundera. Novelista, dramaturgo, poeta y ensayista, escribió novelas como El festín de la insignificancia, La despedida, La Insoportable levedad del ser o la trilogía de ensayos: El arte de la novela, Los testamentos traicionados y El telón, obras que le dieron reconocimiento global, y que ahora se suma a la lista de grandes escritores que partieron sin el Nobel en sus manos.

Admirador del Boom latinoamericano y de sus representantes, censurado por primera vez con un posfacio que escribió de Cien años de soledad en su país, inspirado por Kafka y regresando cada tanto a la obra de Miguel de Cervantes Saavedra. La filosofía es imposible de separarla de la obra de Kundera, de hecho, un artículo en El País de Madrid apuntaba que en su momento podría ser considerado como el nuevo Sartre, pues muchas de sus obras están invadidas de referencias a Platón, Heidegger, Hobbes y Nietzsche.

Ahora con la muerte de Kundera aparecen sus enseñanzas y legado, nos dejó que la política es parte de la cultura como se lo dijo a Antonio Caballero en 1982, nos dijo que la función de la literatura es salvar la memoria, que la novela es más necesaria que nunca, pero que en medio del totalitarismo está muerta. También nos enseñó sobre el humor, pues decía que el sentido del humor era un signo inequívoco de reconocimiento, nos enseñó sobre la levedad, sobre el peso y el cuerpo, así como las dudas existencialistas que quedaron en algunas de sus obras. Al tiempo que nos enseñó a quedarnos en silencio, pues desde 1986 se negó a aparecer en público, un público que hoy lamenta su partida.

Lo que dicen los panelistas

Norma Jimeno, consultora, columnista y filósofa de la Universidad Javeriana, resaltó que la vida de Kundera estuvo marcada por Europa, algo que advierte, lo pone como testigo y protagonista del siglo, “haber vivido la Revolución de Primavera de Praga dio la oportunidad a filósofos y a la literatura como Kundera de abrirnos con temas sobre los cuales navegamos hoy; eso nos dio las armas, los conceptos y elementos culturales para llegar hasta hoy para ver cómo estamos hoy”. Agregó que Kundera era un hombre de la cultura en todo el sentido de la palabra, que trajo las preguntas que se hacía a la literatura y que, leyendo su obra, las preguntas se insertan de manera fundamental, “la levedad es una respuesta al amor y tantos mitos con los que hemos crecido y con los que navega la cultura, es ser capaz de ponernos a pensar con la profundidad sobre muchas cosas y dar respuesta”.

María José Castaño, abogada, consultora en comunicaciones y creadora podcast BibliotecaPersonal, definió a Kundera como un gran europeo que a través de ensayos hablaba de las pequeñas naciones del continente como la entonces Checoslovaquia o Hungría que no tenían un futuro asegurado, así como las referencias al nazismo o estalinismo que ponía en amenaza a la cultura, “su trabajo fue en defensa por las libertades y la cultura y literatura con una función fundamental que buscaba protegerla ante la presión ideológica en países comunistas; es interesante esa literatura como identidad nacional y sus textos defendían la cultura”.

También planteó que hay innovación en la narrativa porque se mezclan varios elementos como las reflexiones o el uso de la filosofía explorando la condición humana, o el uso de elementos psicológicos.

Federico Diaz-Granados, director de la Agenda Cultural del Gimnasio Moderno, poeta, periodista y ensayista, aseguró que Kundera deja un legado a la cultura contemporánea por el valor de sus novelas, así como las lecciones de haber sido un escritor anticipado a una modernidad que vemos hoy en la frontera de géneros literarios que mezclan el ensayo, la poesía, la novela clásica, “él ya se anticipaba a todo eso y mirar desde la vida privada todo un trasfondo de memoria histórica y un trasfondo político”.

Destacó que en temas como lo leve o lo pesado de alguna manera anticipa algo que se relaciona con los amores líquidos, fluidos y la relación sentimental delimitada, “nos hemos formado leyendo páginas de Kundera y aprendemos de levedad y lo pesado del amor porque él le puso palabras de manera poética a eso que todos estamos sintiendo”. Agrega que Kundera en algunas líneas de La insoportable levedad del ser, tocaba el problema de la humanidad siempre, “la historia de literatura no es otra cosa que la historia de liberaciones de alguien que va a buscar a un padre a un terreno distinto o un forastero que llega al pueblo y eso entra en eso y Kundera es fiel a temas clásicos que preocupaban a escritores de todos los tiempos y los pone en un terreno de realidad como la que le tocó vivir a él, la persecución”. Gonzalo Mallarino, poeta, novelista, autor de libros como Trilogía Bogotá y Trilogía de las mujeres y columnista en El Espectador, aseguró que sorprendía cómo un hombre tan consciente en el centro de lo que pasaba políticamente, no descuida su vehículo de expresión, “el lenguaje en el que escribe, en lo leído he encontrado poesía, lo que tramita y cómo cuida el elemento de expresión”. De hecho, recuerda cómo en un texto, Kundera habla sobre el Boom latinoamericano buscando su compañía, busca aliento, “sobre todo si pensábamos en lo que era el Boom con las luchas que él estaba dando; era algo concomitante”.