Denuncian tácticas agresivas por parte de patrulla fronteriza de EE.UU. contra migrantes
A pocas horas del fin del Título 42, aumentan los arrestos de indocumentados en la frontera sur de EE.UU., al tiempo que muchos migrantes se entregan a las autoridades.
Este 11 de mayo el gobierno Biden pone fin al Título 42, la medida que permite expulsar a los migrantes por razones de salud pública.
En adelante, las autoridades fronterizas utilizarán el Título 8 que permitiría la deportación masiva de indocumentados, que viene acompañada de un veto de cinco años en los que las personas no podrán ingresar a los Estados Unidos.
A medida que se acerca la hora cero, migrantes y organizaciones de Derechos Humanos denuncian el uso de tácticas agresivas por parte de las autoridades fronterizas en Estados Unidos para arrestar a inmigrantes indocumentados que cruzan irregularmente desde México.
Asimismo aumentan los arrestos de indocumentados que cruzan irregularmente la frontera, e incluso migrantes que se entregan a las autoridades tras conocer que no podrán solicitar asilo.
Algunos migrantes que logran cruzar, han denunciado tratos de discriminación y perfilamiento racial por parte de miembros de la patrulla fronteriza y soldados de la Guardia Nacional, al tiempo que en redes sociales comenzaron a viralizarse videos en los que uniformados forman una barrera humana para impedir que los migrantes lleguen a territorio estadounidense.
El gobernador de Texas, Gregg Abbot, aseguró que aún quienes logren cruzar la frontera, serán enviados en buses a ciudades como Washington, Nueva York y Chicago, lugares a los que ya ha enviado más de 13.000 indocumentados en los últimos meses
“Vamos a seguir enviando migrantes en buses porque nuestras ciudades pequeñas no tienen la capacidad para atender tantas personas y las estamos enviando además a ciudades santuario y más grandes”, dijo Abbott.
Texas ha propuesto la creación de una “unidad de protección fronteriza” en la que permitiría incluso que civiles armados puedan vigilar la frontera y evitar que los migrantes crucen hacia Estados Unidos.
Críticos afirman que Texas está usurpando la responsabilidad de hacer cumplir las leyes de inmigración del gobierno federal al crear su propio sistema unilateral que utiliza la ley estatal como arma y pone en peligro a los inmigrantes, quienes huyen de la violencia y persecución de sus países de origen.