Los desafíos de la energía en el país y qué hacer hacia el futuro
Con muchas preguntas sobre el futuro del sector se llevó a cabo “Los desafíos de la energía”, evento realizado por Prisa Media y sus medios Caracol, LaW y El País, con el apoyo de Coca-Cola, Promigas, Ecopetrol, EL PNUD, Celsia y la Fundación Konrad Adenauer
Durante la mañana del pasado 19 de octubre, representantes del sector privado, del sector público, de la academia, del gobierno, congresistas, gremios y asociaciones se reunieron en Bogotá para discutir los desafíos de la energía en el país y qué hacer hacia el futuro
Uno de los temas más debatido fue la transición energética que ha planteado como prioridad el gobierno del presidente Gustavo Petro. Al respecto, miembros del gobierno plantearon que su propuesta busca una transición energética justa, gradual y sostenible. Muchos de los asistentes plantearon que hasta el momento no saben cómo se hará esa transición, expresaron la necesidad de definir un plan, no saltar al vacío y garantizar la autosuficiencia energética de Colombia en todo este proceso.
Señalaron, además, que no se pueden excluir tan fácilmente las fuentes de energía, por el contrario, deben utilizarse todas. Se pronunciaron frases como: “Sin minería no hay transición energética” o “sin gas no hay transición energética”.
También se expuso que el sistema que construyó el país después del apagón de los años 90 permitió una generación sólida de energía que no se puede echar para atrás con la transición energética, porque se perderían muchos avances.
El objetivo es hacer la transición energética con el mínimo coste y teniendo en cuenta las condiciones particulares de Colombia, como ser un país petrolero, que no es productor de CO2, que tiene un grave problema de deforestación. Esa transición, además, debe incluir a todos los sectores de la sociedad.
Expusieron que es necesario estudiar lo que está pasando en el mundo antes de tomar decisiones, porque muchos países han revisado su transición energética a raíz de la guerra en Ucrania o por sus condiciones internas. Por ejemplo, varios están volviendo a utilizar el carbón.
Sobre la transición justa, el gobierno precisó que existen unas deudas históricas y que en muchas zonas del país donde hay minería y el petróleo también se han presentado conflictos y pobreza.
Como propuesta para concretar cómo se hará esta transición, se planteó la necesidad de crear una comisión o un grupo de trabajo con representantes del sector para que se le explique al gobierno la situación actual y definan una ruta conjunta.
Sobre la viabilidad del diálogo, varios asistentes citaron como un buen ejemplo las negociaciones que se llevaron a cabo para solucionar con el Ministerio de Minas el problema de las altas tarifas de energía. Esta negociación también mostró que el sector tiene un marco institucional y legal sólido. Es necesario cuidar este marco legislativo.
La guerra en Ucrania sirvió también como telón de fondo para discutir la necesidad de que Colombia sea autosuficiente y al respecto hubo preguntas sobre la conveniencia de detener las exploraciones y de importar gas, porque la energía más costosa es la que no se tiene cuando se necesita.
Otro tema planteado fue la desigualdad que hay en el país en el acceso a la energía. Familias colombianas todavía cocinan con leña y hay zonas donde no hay agua potable porque no hay energía. En ese sentido, hubo acuerdo en la necesidad de trabajar no solo sobre la oferta sino también sobre la demanda y en usar la energía para reducir la brecha.
Precisamente, sobre las tarifas de la energía surgieron varias preguntas: ¿Es necesario tener subsidios para el estrato 4? ¿Es necesario revisar la forma en que se calculan las tarifas? ¿Es el aumento de estas un problema estructural o coyuntural?
Por último, respecto a los proyectos en curso se comentó la necesidad de evaluar las consultas con la comunidad que han demorado la puesta en marcha de estos y al respecto una sugerencia fue planear los proyectos futuros con la comunidad antes de ponerlos en marcha.