Niños colombianos tendrán suelas diseñadas especialmente para sus pies
Aunque el pie de los niños colombianos es más ancho que el de los ibéricos y los cariocas, hasta ahora el calzado escolar usado entre los 4 y los 7 años de edad en Colombia se ha definido por formas y estilos provenientes de estos países.

Aunque no es frecuente, cuando la diferencia de la medida es muy grande, sí se genera cansancio y hasta existen probabilidades de malformaciones, comenta el médico Gentil Gómez. Por eso, y para no desconocer la antropometría real de los menores, desde la Universidad Nacional de Colombia se está diseñando un modelo de soporte (suela, plantilla, etc.) con base en los pies de los pequeños del país. Se trata de dos proyectos, uno de diseño que está en fase final y otro de refinamiento que busca que estos modelos lleguen a los microempresarios como nuevas ofertas para la industria del calzado escolar. Ambos trabajos son liderados por el director de la Escuela de Diseño Industrial de la U.N., Alfonso Bohórquez, junto con un grupo de estudiantes de esta carrera y de Ingeniería Industrial. “El objetivo es aportar ideas en pro del desarrollo competitivo de este sector. Este es un tema relativamente nuevo en la industria, en la que ha predominado la copia, por ejemplo, de bases o suelas españolas y brasileras”, asegura el docente. Para llegar a una definición del diseño del soporte se hizo necesario, como parte de la investigación, realizar pruebas cuantitativas con 96 niños de la ciudad, aprovechando que durante la infancia maduran sus estructuras óseas y se pueden definir las características antropométricas y biomecánicas del pie. Adicionalmente, realizaron investigaciones cualitativas con los padres de familia a través de encuestas que tuvieron en cuenta criterios de compra y el nivel de satisfacción con los productos. “También los niños hicieron un ejercicio de interpretación del calzado que preferirían usar. Esto demuestra que los diseños están muy cercanos al lenguaje de ellos”, sostiene Alfonso Bohórquez. El proyecto II Luego de definir el diseño, los investigadores tienen como segundo proyecto la validación y refinamiento de este. Para ello, será necesaria una relación y acercamiento con los empresarios y el Gobierno local. A partir de la iniciativa de implementar un centro de servicios empresariales, que la Secretaría Distrital de Desarrollo tiene con el sector del calzado en el barrio Restrepo, la U.N. se hace partícipe con sus propuestas. “Desde el diseño, la mayoría de los empresarios copian lo que ven en el mercado. Una de las formas de competir es precisamente con diseño propio y confort. En ese aspecto es en el que la Universidad ayuda al fabricante”, comenta Rolando Higuita, estudiante de esta cartera. Y agrega: “Luego del primer proyecto de la Institución, el siguiente paso es la transferencia de conocimientos a los fabricantes”. El director de la Escuela de Diseño Industrial añade que lo que sigue es pasar el diseño a una fabricación de prueba, que tanto empresarios como usuarios lo conozcan y hagan una retroalimentación con las observaciones recibidas. “Para tener la certeza de que funcionará a escala industrial hay que hacer una serie de pruebas a partir de los diseños. De igual modo, se necesita la ayuda de la Secretaría para que los productores tenga recursos para comprar materia prima”, añade. Tanto diseñadores como ingenieros industriales estarán con los fabricantes mirando detalles y atendiendo recomendaciones; la idea es que también los usuarios comprueben la efectividad de los diseños para poder llegar a una comercialización masiva en un futuro.
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