Intelectuales ofrecen a Santos un Movimiento Amplio por la Paz

Un amplio grupo de académicos le ofreció al presidente Juan Manuel Santos su contribución “de buena voluntad en coadyuvar a la construcción de un movimiento amplio por la paz en Colombia", para que ponga “su coraje y audacia en el campo de la reconciliación”, bajo el precepto de la instauración definitiva del monopolio de la fuerza por parte del Estado, que el Gobierno y la sociedad deben construir

En una carta firmada por más de 150 catedráticos y publicada en el portal razonpublica.com, los catedráticos recuerdan que el presidente al posesionarse dijo que “la puerta del diálogo no está cerrada con llave”, y que “a los grupos armados ilegales que invocan razones políticas y hoy hablan otra vez de diálogo y negociación, les digo que mi Gobierno estará abierto a cualquier conversación que busque la erradicación de la violencia y la construcción de una sociedad más próspera, equitativa y justa”

Sostienen que de acuerdo con varias expresiones del jefe de Estado, pero también de la reciente declaración de la guerrilla de las Farc en las que “no se ha arriado la bandera de la reconciliación”, se requiere ese coraje y audacia

Afirman que en la etapa actual del conflicto interno se hacen evidentes primordiales realidades: el avance decisivo de la acción contrainsurgente del Estado mediante la acción de la Fuerza Pública, la pérdida de la proyección estratégica de la guerrilla, que sin embargo persiste con estructuras organizadas que producen diverso tipo de operaciones ofensivas, lo que hace previsible la continuación del conflicto interno con la inevitable prolongación de sufrimiento humano, pérdida de vidas, destrucción material y envilecimiento de la guerra

“Ante tan sombría perspectiva creemos que sólo la audacia política, que no identificamos con inopinada temeridad, puede abrir caminos inéditos para la reconciliación”, dicen, y agregan que Santos a realizado actos de audacia como la ley de víctimas y la normalización de relaciones internacionales, “cuya calidad quisiéramos ver dirigidas también a la búsqueda de superación del conflicto interno mediante el diseño de una política que permita conversaciones serias y claras con la insurgencia”

“Cuando señalamos la necesidad de coraje y audacia, también en el campo de la reconciliación, somos conscientes de que en el país operan poderosos intereses de orden militar, económico y político que se benefician con la prolongación de la guerra. Allí está, al menos en parte, la fuente que alimenta la retórica belicista y la excitación a la revancha que cobran intensidad cuando se producen señales de distensión. Tal vez no sobre consignar aquí, para evitar juicios insidiosos, que nos inspira la idea de la instauración definitiva en Colombia del monopolio de la fuerza por parte de Estado, pero bajo la inamovible condición de que es el monopolio legítimo de la fuerza el que corresponde construir”, añaden

Los catedráticos sostienen que entienden la razón que le asiste al Gobierno para proceder en materia de conversaciones con independencia y cautela. Pero al mismo no pueden asumirse por la ciudadanía como asunto privativo, o bien de las instituciones armadas, o bien como asunto del fuero presidencial. “La búsqueda colectiva de la paz es quizás el objetivo nacional a la vez más incluyente y exaltante”, expresa la carta

Y concluyen que “comprometemos nuestra buena voluntad en coadyuvar a la construcción de un movimiento amplio por la paz en Colombia en la persuasión de que encontraremos también comprensión más allá de las fronteras del país, en pueblos y gobiernos que aspiran a que los conflictos se tramiten por los senderos civilizados de la controversia democrática, del respeto a los derechos humanos y a las normas del Derecho Internacional”

Entre los firmantes del documento figuran el sacerdote jesuita Gabriel Izquierdo, Hernando Gómez Buendía, Guillermo Hoyos Vásquez, Daniel Pécaut, Socorro Ramírez, Alpher Rojas Carvajal, María Victoria Duque López, Medófilo Medina, Alfredo Molano Bravo, Juan Tokatlían, Gabriel Rosas Vega, Ricardo Mosquera Mesa, Oscar Collazos, Amylkar Acosta Medina, Rosalía Correa Young y Julio Silva Colmenares.