La estética y la salud, en barrena
Uno de los hechos claros, contundentes y reconocidos en Medellín es el relacionado con los avances de la ciencia médica, de las investigaciones universitarias para mejorar la salud, y para fortalecer la calidad de vida de propios y extraños. Eso se ha demostrado con investigaciones y avances también contundentes.
Uno de los hechos claros, contundentes y reconocidos en Medellín es el relacionado con los avances de la ciencia médica, de las investigaciones universitarias para mejorar la salud, y para fortalecer la calidad de vida de propios y extraños. Eso se ha demostrado con investigaciones y avances también contundentes. Es un hecho y los hechos no se argumentan. Medellín tiene también entre sus atractivos el llamado Turismo de la salud, en el que han participado cientos de personas, que han escogido esta ciudad como destino turístico para mejorar su salud, o para lograr la fecundación de sus parejas, en experimentados y exitosos laboratorios. O para mejorar su figura, para alimentar la vanidad, aumentar unas curvas pectorales, levantar el derriere, o eliminar aquellos gramos de grasa demás. También hay Turismo de estética. Es innegable el flujo de viajeros, especialmente mujeres que cada año se acercan a Medellín para mejorar sus figuras en algunas de las afamadas clínicas o centros médicos dedicados a estos tratamientos. Semana Santa es la época preferida por la disponibilidad de tiempo para los pacientes y de los profesionales médicos y esteticistas. Pero hay una alerta sustancial. En Medellín también se ha denunciado, con más frecuencia de la que quisieran las autoridades sanitarias, el deterioro de estos servicios y las deficiencias en los tratamientos. Senos de silicona que luego pudren los naturales, grasas de cualquier tipo inyectadas en glúteos que luego se caen más de lo que estaban, cirugías abdominales para retirar una “llantica” que molestaba, pero que terminan en una enorme y desagradable cicatriz. Las denuncias pululan en el Servicio Seccional de Salud de Antioquia, la dependencia del gobierno departamental para estudiar esas querellas… No son todos los centros médicos de estética, ni todas las clínicas que ofrecen y prestan estos servicios los que están el remolino de la alerta, ni los que afrontan las denuncias e investigaciones. Eso es cierto. Pero algunos de ellos han cometido errores, han dañado la salud de algunas pacientes, deteriorado la figura de ellas, y van erosionando la imagen de una Medellín especialista en estos métodos y servicios de salud. Este año, la Secretaría de Salud ha sancionado con el cierre cinco centros médicos de estética por incumplir con los requerimientos legales y por las denuncias de la comunidad: Isis, Centro de estética Palmares, Fundación Total Help, Prana Estetic y Dermolaser. El gobierno de Antioquia advierte que ninguna clínica cerrada podrá reabrir sus puertas al público bajo ninguna circunstancias y mantendrá un estricto control de este negocio estético que ha tomado tanta fuerza, especialmente, en el público femenino. Prosiguen las investigaciones por otras muchas denuncias por malos servicios o irregularidades en la práctica de estos tratamientos. La alerta es enorme. Como una enorme barrena, el afán por sacar tajada en este negocio va haciendo mella y erosiona la imagen de las pacientes, pero también de una ciudad que ha luchado por ser líder en servicios de salud y en investigaciones científicas para lograrlo. No son todos, pero los avivatos en este negocio también pululan. Cuide su salud. LUIS ALBERTO MOGOLLÓN



