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FARC intentan sin éxito ataques aéreos

La Fuerza Aérea de Colombia destruyó el lunes una avioneta cargada con explosivos y un jefe militar acusó a la guerrilla izquierdista de pretender utilizarla para bombardear una brigada del ejército en el noreste del país, cerca de la frontera con Venezuela.

BOGOTA.---- La Fuerza Aérea de Colombia destruyó el lunes una avioneta cargada con explosivos y un jefe militar acusó a la guerrilla izquierdista de pretender utilizarla para bombardear una brigada del ejército en el noreste del país, cerca de la frontera con Venezuela.
"Se logró la destrucción de una avioneta cargada de explosivos que pretendía ejecutar un atentado terrorista sobre las instalaciones de la Brigada 18 en el municipio de Arauca y causar una gran tragedia", dijo el general Martín Orlando Carreño, comandante de la Segunda División del Ejército.
El militar acusó del fallido intento a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la mayor guerrilla del continente, conformada por unos 17.000 rebeldes.
Las instalaciones de una brigada del ejército normalmente tienen capacidad para alojar a más de 1.000 efectivos.
Carreño precisó que la avioneta, cuya procedencia y cantidad de explosivos que tenía aún se desconoce, fue destruida en una pista clandestina cercana a la ciudad de Arauca, ubicada en una región con alta presencia de las FARC y del segundo mayor grupo guerrillero, el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
También es una región ganadera y donde se ubica el segundo mayor complejo para la producción del petróleo del país, el campo Caño Limón con 120.000 barriles diarios, operado por la estadounidense Occidental Petroleum Corp. , recientemente declarada objetivo militar por el ELN.
Aunque la guerrilla roba frecuentemente aviones y helicópteros para transportar heridos o movilizar a sus líderes, hasta ahora no los había usado para realizar ataques. El fin de semana pasado las FARC robaron un helicóptero en una zona cercana al municipio de Palmira, al suroeste del país.
Los ataques de las FARC contra pueblos y ciudades, incluyendo la capital de este país andino, han arreciado luego de que el gobierno rompió en febrero el infructuoso proceso de paz que inició con ese grupo en 1999, con el que buscaba dar fin a la guerra interna de 38 años.
En el conflicto, que dejó 40.000 muertos en el último decenio, la mayoría civiles, también combaten los paramilitares de ultraderecha.
En tanto, el ejército informó que rescató el domingo en la tarde a 20 personas, incluyendo varios niños, que habían sido secuestradas por las FARC en un retén de esa guerrilla en el sureño departamento de Caquetá.

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