El ahorro está en los modelos viejos de juegos de vídeo
Hay muy pocas cosas tan incesantes como las súplicas de un niño a sus padres desesperado por el último sistema de juegos de vídeo y, especialmente ahora, con tres de los más potentes equipos compitiendo codo a codo en el mercado.
LOS ANGELES.---- Hay muy pocas cosas tan incesantes como las súplicas de un niño a sus padres desesperado por el último sistema de juegos de vídeo y, especialmente ahora, con tres de los más potentes equipos compitiendo codo a codo en el mercado.Sin embargo, estos sistemas no son necesariamente baratos, de 199 a 299 dólares, en un momento en que la economía pudiera o no estar saliendo de una recesión y el desempleo es el mayor en cinco años.¿Qué puede hacer un padre escaso de dinero?La respuesta está en los modelos anteriores, que no son de la última tecnología pero funcionan perfectamente bien. Es posible que no sean tan fáciles de encontrar, pero tienen accesorios, son capaces de ofrecer tanto entretenimiento como los nuevos sistemas y, lo más importante, son menos costosos.El Dreamcast de Sega Corp., que tiene sólo dos años, fue una decepción comercial tan grande que la compañía abandonó totalmente el mercado de computadoras a principios del 2001 para dedicarse estrictamente a publicar juegos.El precio de la consola ha descendido desde que la compañía limpió sus almacenes a su actual precio de realización de 49,99 dólares.Dos tercios más barato que en esta misma época el año pasado, el Dreamcast admite cientos de juegos, todos a precios razonables desde 9,99 a 39,99 dólares. También admite CD de música y una conexión telefónica para jugar online.Ninguna otra consola ofrece esto, ni siquiera el Xbox de Microsoft Corp., que tiene un puerto para banda ancha pero no juegos online hasta principios del año próximo.Aunque quizás sea difícil conseguir un Dreamcast en la tienda local, ya que quedan muy pocos en los inventarios, las unidades de uso abundan en los sitios de subastas de la Internet y pueden comprarse en algunos casos a menos de 35 dólares.Entiéndase bien que no hay comparación entre el Dreamcast y Xbox, Gamecube de Nintendo Co. o PlayStation 2 de Sony Corp. Es un sistema menos potente y, con 27 meses en el mercado, tiene una existencia de menos de cinco millones de equipos, algo que le tomó a PS2 bastante menos de un año.Sin embargo, quienes lo tienen les gusta y aplacará a los chicos hasta diciembre del año que viene, cuando (se presume) las principales unidades en el mercado costarán menos. MARIO ES AUN EL REYAlgunos niños no quieren el Sega porque le falta el pequeño plomero del inmenso bigote que se hizo el rey de los juegos de vídeo: Mario, el carácter que transformó a Nintendo en la corporación multimillonaria que es hoy en día.El GameCube no ofrece a Mario, sólo a su menos popular hermano Luigi. El próximo título de consola de Mario, "Mario Sunshine", no llegará a las costas estadounidenses hasta mediados del 2002.Los chicos (y los padres) que quieran la última verdadera y real consola de Mario tienen que buscar el anterior sistema de Nintendo 64, introducido en 1996 y aún en el mercado.Una pesquisa en el nuevo Toys 'R Us de Times Square de Nueva York el último día de noviembre reveló dos docenas en los anaqueles.El N64 de 99 dólares fue el último sistema de cartuchos en Estados Unidos. Los cartuchos son más caros para fabricar y, por lo tanto, cuestan más a los clientes. Este fue el mayor golpe para el N64, que llegó después que los sistemas de CD estaban ya en el mercado.Sin embargo, ya no son tan caros y lo mejor de la plataforma, los títulos "AAA", se consideran de primera."Legend of Zelda: Ocarina of Time" es percibido aún, cinco años después de su debut, como uno de los mejores juegos de vídeo hasta la fecha. PSX AUN UN LIDER DEL MERCADOY también está Sony. Hace siete años en esta época, Sony era casi inexistente en los juegos de vídeo, pero en septiembre de 1995 presentó el PlayStation, un sistema de CD de 32-bit que en su momento fue considerado la norma de juegos tridimensionales, un sector en que la industria apenas está entrando.El PlayStation Uno es menos potente, punto por punto, que el N64 de 64 bits o el Dreamcast de 128 bits, pero mientras la producción para el N64 y Dreamcast casi se ha detenido, siguen saliendo nuevos títulos semanalmente para el PSX, de 99 dólares, que tiene una existencia de más de 31 millones de consolas y más de 1.100 juegos.También tiene otra ventaja para los padres que necesitan ahorrar: sus juegos son compatibles con la consola PlayStation 2, que domina el mercado, lo que implica que una actualización del equipo no requiere deshacerse de toda la colección de títulos viejos.El PSX es también portátil, que no lo son el N64 ni el Dreamcast, con la adición del LCD Mobile Monitor de cinco pulgadas de Interact Accessories, aunque éste cuesta 149 dólares, más que la consola.Al final, no importa cual de estas consolas escojan los padres. En esencia se van a ahorrar gran cantidad de dinero a corto plazo para una experiencia de juegos que para muchos chicos puede ser tan satisfactoria como los que cuestan tres veces más.



