Recordando a Gabriel García Márquez, con Daniel Samper Pizano

“Mientras me esperaron en un avión para ir a Valledupar, Gabo dijo cuando me vio llegar con mi pinta de noruego de 15 años –no joda esperamos todo esto por este cachaco de mierda-” señaló  el amigo y colega de Gabo, Daniel Samper Pizano, al recordar cómo conoció al premio Nobel colombiano

Samper Pizano aseguró que hace muchos años dejó de hablar con Gabo, pues era consciente de los problemas de memoria que sufrió el Nobel y dijo que ese es el peor castigo para un personaje con la memoria y la imaginación de García Márquez

Recordó cómo llegó a ser uno de los periodistas que entrevistaron con mayor frecuencia al Nobel y dijo que simplemente el mismo Gabo con cada evento y acontecimiento que compartían fue quien propuso las entrevistas

“Alguna vez empezamos a hablar de la vieja máquina de escribir, y me dijo, no joda, esto podría ser una buena historia para una entrevista y yo le dije, bueno hagámosle”Le contó a Caracol Radio un acontecimiento que le llamó mucho la atención y que terminó en un extenso texto publicado en El Tiempo. Un encuentro en un hotel en el que Gabo tomó la palabra y propuso cambios para la Constitución

“Sacó su actitud de abogado, lo mismo que hacemos todos los que tuvimos por lo menos un día de abogacía, se tomó la palabra y recomendó algunos cambios que dejamos consignados en un artículo que al final no tuvo mucha fuerza”

Dijo que tiene la totalidad de las obras en sus primeras ediciones, una que incluso el mismo Gabo le pidió le regalara, pero que él le negó, porque simplemente a Gabo le quedaba más fácil conseguirla, cosa que logró años más tarde

Habló sobre la incomodidad que le causó la fama por el premio Nobel de literatura, insistió que Gabo en Colombia y con sus amigos siempre fue el mismo, el otro Gabo era en el exterior por obvias razones, consecuencia de su reconocimiento

“Era un hombre tímido, no le gustaba la fama, una vez en una corrida le dijo a una señora que no le firmaba papeles porque eso trae problemas, solo firmó los libros le contestó a la señora que salió de la corrida y al final lo esperó con ocho libros que Gabo firmó”