Jarillón de Unisabana tiene 100 años de garantía

En abril de 2011 la Universidad de la Sabana sufrió la terrible tragedia de quedar bajo las aguas contaminadas del río Bogotá, por la ruptura de un jarillón que no resistió la furia de una de las temporadas de lluvias más fuertes de los últimos tiempos en el centro de Colombia

Su hermoso campus y sus modernas instalaciones, algunas de las cuales acababan de ser inauguradas, quedaron literalmente bajo el agua que en muchos puntos del lugar superó los dos metros de altura

Las clases tuvieron que ser temporalmente suspendidas y luego reanudadas en aulas de otros centros educativos y de entidades que apoyaron a los sabaneros en ese difícil momento

Primero fue la inundación de finales de abril y cuando la comunidad académica creía que la emergencia sería rápidamente superada porque las aguas bajaban, vino una segunda inundación mayor, pocos días después

En medio de la tragedia, que generó impotencia, desazón, seguramente muchas lágrimas y pérdidas enormes, los directivos emprendieron una titánica tarea para recuperarse y un punto básico fue la construcción de un jarillón que sea capaz de resistir otro embate de la naturaleza

No dudaron en buscar a expertos internacionales y miraron hacia Holanda, que tiene amplia experiencia y tecnología para enfrentar este tipo de situaciones

Tras juiciosos estudios, se encargó la construcción del jarillón, que alcanzó a tener oposición entre algunos sectores colombianos. Su costo fue de 11.000 millones de pesos, una cifra importante, aunque menor si se tiene en cuenta que las inundaciones causaron pérdidas por 35.000 millones, de los cuales, 26.000 millones fueron asumidos por aseguradoras

Este jarillón ya está terminado y tiene una garantía de 100 años, dada por sus constructores holandeses, o de 200 años si se les hace mantenimiento, que es la ejecución de obras preventivas frente a las rectificaciones que regularmente hace la CAR sobre el río. Y aunque la empresa que construyó el jarillón es de los Países Bajos, la obra fue dirigida por un colombiano, Fortunato Carvajal, quien vive desde hace muchos años en Holanda. La interventoría del proceso estuvo a cargo de una firma nacional

El jarillón no ha sido puesto a una prueba dura de la naturaleza porque afortunadamente no se ha presentado una temporada de lluvias de gran magnitud, pero existe la confianza de que el tema ha sido exitosamente superado

Y mientras llega ese momento, la Universidad de la Sabana, que tiene alrededor de 7.000 estudiantes pregrado y 2.500 de prostgrado, sigue adelante. Hoy está promoviendo tres nuevos doctorados en educación, medicina clínica e ingeniería logística

Su Facultad de Comunicación tiene estudios muy modernos que envidiarían muchas entidades y su carrera de Gastronomía cuenta con instalaciones de alta tecnología, para destacar sólo algunas de las fortalezas de ese centro de educación superior

Precisamente dicha carrera de Gastronomía se apresta a abrir un restaurante escuela que estará al servicio de quienes los fines de semana visitan los municipios de Chía, Cajicá, Zipaquirá y otros cercanos, en busca de buenos platos

Así, como dice el rector Obdulio Velásquez, quedó demostrado que las crisis no deben ser el final, sino una oportunidad para tener logros mayores