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El ejército pidió perdón por masacre de cuatro campesinos en Antioquia

Las víctimas fueron sacadas de un predio en el municipio de Montebello en el año 2000 y luego aparecieron muertas y vestidas con camuflado.

Foto / Fundación Forjando Futuros

Antioquia

Este martes se realizó el acto de perdón por parte del ejército a las familias de cuatro personas asesinadas en el año 2000 a manos de integrantes del batallón mecanizado Juan del Corral adscrito a la Cuarta brigada. Dos de estas muertes fueron catalogadas por el juez que ordenó el acto de perdón como una ejecución extrajudicial, también conocida como falso positivo.

Durante el evento las víctimas relataron los hechos y recodaron el dolor que ha causado esa acción de la fuerza pública contra la población civil, aseguran que pese a que han pasado 21 años de que Uberney Giraldo Castro, José Evelio Gallo, exmilitantes de la Corriente de Renovación Socialista, cuyos cuerpos fueron encontrados con señales de tortura en el Carmen de Viboral, no se reponen, una de las razones que aducen es que los cuerpos de esas dos personas fueron robados de la morgue del Carmen de Viboral y hasta la fecha se desconoce su paradero. Los otros fallecidos en Montebello son un profesor y otros trabajadores.

Hace ya 21 años largos hombres del batallón Juan del Corral pertenecientes a la Cuarta Brigada del ejército colombiano disfrazados con brazaletes de las Autodefensas Unidas de Colombia entraron a la finca la Galleta, propiedad de sociedad Horizontes se llevaron a los compañeros cuando estaban montando a la chiva la producción de cítricos y aguacate”, recordó Pastor Jaramillo, representante legal de la sociedad agropecuaria Horizontes.

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Las fuerzas militares, en representación del Mayor Alfredo Remolina Riaño, Comandante encargado del Batallón Juan del Corral, desde donde cometieron los crímenes, pidió perdón a las familias de las víctimas y rechazó estos hechos que, dice, van en contra de los lineamientos de la institución castrense.

Aquí el comportamiento de alguien que no fue un verdadero soldado nos agredió a todos, y si en su corazón está perdónelos y al ejército compréndelo y otórguele el favor del buen nombre, pues el ejército como tal, siempre desde sus inicios fue creado para defender a la ciudadanía y a la democracia a cualquier costo. En representación del ejército Nacional lo sentimos mucho”, dijo el oficial.

Por estos hechos El Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Antioquia, ya condenó a los militares Humberto de Jesús Blandón Vargas y Sandro Fernando Barrero, miembros de la Cuarta Brigada del Ejército Nacional, como autores penalmente responsables de los delitos de homicidio agravado y secuestro extorsivo, en el año 2004; mientras que en el año 2005, el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Antioquia, confirmó la condena en segunda instancia y la Corte Suprema de Justicia hizo lo propio en el año 2008.

Explicaron además que el Eduardo Herrera Berbel, comandante de la Cuarta Brigada para la fecha de los hechos y el Teniente coronel Miguel Sierra Santos comandante del batallón Juan del Corral, también para época, no han comparecido ante los tribunales por esta masacre de la que hoy pide perdón el ejército.