El secuestro y posterior liberación del gestor cultural de Valledupar, Luis Pérez, ocurrida en Malambo, tiene similitudes con el secuestro express que sufrió en Bolívar, Luis Zulúaga, esposo de Diana Escorcia, arquitecta de La Ventana al Mundo.

En ambos casos los profesionales fueron citados en fincas para supuestamente concretar negocios, siendo una excusa para pedir una suma cercana a los 50 millones de pesos por su libertad.

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El investigador del conflicto y profesor de la Universidad del Norte, Luis Trejos, señala que es necesario que se active una alerta para evitar que casos similares sigan ocurriendo.

"Ante la crisis que ha generado la pandemia del COVID-19 que mantiene muchos comercios cerrados, los grupos armados han visto afectadas sus finanzas por cobro de extorsiones, por lo que estarían acudiendo a este tipo de delito para obtener rentas ilegales", indicó Trejos.

De acuerdo con las autoridades, los secuestradores serían estructuras urbanas bajo coordinación del Clan del Golfo.